El pasado día 1 de octubre de 2021, en la capital aragonesa y con la brillantez y solemnidad a la que nos tiene acostumbrados, el Cuerpo Nacional de Policía celebró la festividad de sus Patronos, los Santos Ángeles Custodios.
Los actos se iniciaron a las 11.00 horas en la Catedral Basílica de Nuestra Señora Virgen del Pilar, con la celebración de la Santa Misa, presidida por el Arzobispo de Zaragoza, Monseñor Carlos Manuel Escribano.
El Oficial de Policía Javier Obis dio lectura del libro del Exodo: Esto dice el Señor: voy a enviarte un ángel por delante para que te cuide en el camino y te lleve al lugar que he preparado. Hazle caso y obedécele, no te rebeles porque lleva mi nombre y no perdonará tus rebeliones. Si le obedeces fielmente y haces lo que yo digo, tus enemigos serán mis enemigos y tus adversarios serán mis adversarios. Mi ángel irá por delante y te llevará a los tiempos de los amorreos, hititas, perimitas, cananeos, heveos y jebuseos, y yo los exterminaré.
Al Salmo, todos respondimos: A sus ángeles ha dado órdenes para que te guarden en tus caminos.
Se dio lectura del Santo Evangelio según San Mateo: En aquel tiempo se acercaron los discípulos a Jesús y le preguntaron:
¿Quién es el mayor en el reino de los cielos? Él llamó a un niño, lo puso en medio y dijo: en verdad os digo que si no os convertís y hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos.
Por tanto, el que se haga pequeño como este niño, ese es el más grande en el reino de los cielos. El que acoge a un niño como este en mi nombre, me acoge a mi. Cuidado con despreciar a uno de estos pequeños porque os digo que sus ángeles están viendo siempre en los cielos el rostro de mi padre celestial.
Les ofrecemos ahora, queridos lectores que nos siguen, algunos pasajes de la Homilia, en la que el Arzobispo de Zaragoza dijo lo siguiente: Quiero en este día felicitar en primer lugar a todos los que formáis parte del Cuerpo Nacional de Policía y celebrar la fiesta de vuestros Patronos los Santos Ángeles Custodios. Deseo de corazón que mi felicitación cordial llegue también a vuestros familiares más allegados. Vuestras familias viven, gozan y sufren día a día los avatares de este digno ministerio profesional, que consiste en velar por la seguridad y el orden en el seno de nuestra sociedad y el ayudar a todos los ciudadanos en distintos momentos y situaciones.
Yo creo que en la memoria de todos está el papel que el Cuerpo Nacional de Policía ha ejercido desde que comenzó la pandemia, en especial durante los complejos días del confinamiento. Vuestra serena presencia y abnegado servicio, junto a la Guardia Civil, el Ejército y la Policía Local, fue un gran apoyo para toda la sociedad en aquellas jornadas tan dramáticas. Al celebrar con vosotros, queridos policías, la fiesta litúrgica de los Santos Ángeles Custodios quiero aludir a la doble significación que podemos contemplar en esta festividad. Los Santos Ángeles actúan en favor vuestro como verdaderos custodios que os defienden y protegen frente a las adversidades y riesgos que comporta la misión policial. Al mismo tiempo vosotros, imitando el modelo de vuestros Santos Patronos, protegéis a los ciudadanos, defendiéndoles de graves peligros en unas ocasiones y brindándoles la confianza que supone vuestra presencia en determinados lugares y momentos, en otras.
Ambas dimensiones en la celebración que nos reúne hoy constituyen una llamada clara y sencilla para que valoremos la importancia de vuestro trabajo como servicio a la sociedad y a la vez actualicemos la responsabilidad que a todos nos compromete en relación al prójimo. En las lecturas que hemos escuchado en esta celebración eucarística se nos muestra la preocupación de Dios por su pueblo, por nosotros.
Dios envía a sus ángeles para ayudar a las personas y nos muestra así como debe ser esta relación con el prójimo a la que acabo de aludir. Él se preocupa siempre de todos los hombres.
La persona humana, creada desde el amor de Dios a su imagen y semejanza se ve , de algún modo, imbuida también en esa necesidad imperiosa de cuidar a los demás, de servir a los demás.
Todos hemos salido de su mano amorosa, cosa distinta es el modo de cómo cuidamos a los demás, desde dónde lo hacemos y qué necesidades y horizontes tenemos. La fiesta litúrgica que hoy celebramos nos propone un modo de hacerlo, una medida, la del corazón de Dios. Dios habla de que el único que es capaz de acoger a todas las personas, de unir a todos, de ver el corazón de todos, de no hacer distinción entre las personas, es él mismo, es Dios. Esa propuesta nos ofrece una medida apasionante que os animo a reflexionar, pues os puede iluminar a la hora de ejercer vuestra tarea de custodia de los ciudadanos, que os encomienda la sociedad.
Actuar en definitiva conforme a la medida de Dios, preocupándoos por todos y dándoos sin reservas a los demás. Estoy convencido de que os puede ayudar como Fuerzas del Orden Público a colmar vuestra razón de ser, que no es otra que la conservación de una convivencia justa, que se concreta en el servicio al bien común, sirviendo al bien de cada ciudadano. Vuestro esfuerzo diario por la seguridad ciudadana es necesario para garantizar la dignidad de las personas, su libertad y seguridad, el disfrute efectivo de sus derechos y el cumplimiento de sus deberes. Es una tarea dignísima que hoy reconocemos agradecidos y que se concreta, jornada tras jornada, en vuestro trabajo, vuestra entrega y vuestro sacrificio a favor de la seguridad y convivencia ciudadana.
Queremos hoy, queridos amigos, encomendaros a la protección de los Santos Ángeles Custodios para que ellos sigan siendo vuestros valedores ante los múltiples peligros que os acechan en el desarrollo de vuestro trabajo y que os veáis protegidos por el amor y la providencia divina. Encomendamos de un modo especial a vuestros compañeros y compañeras que han entregado su vida en acto de servicio, singularmente a las víctimas del terrorismo. Que el Señor los acoja en su seno, y a sus familias les fortalezca en la esperanza. Que los Santos Ángeles Custodios y la Santísima Virgen del Pilar, a la que os encomendamos en este mes de octubre, os protejan y alienten en vuestro quehacer diario a favor de toda la sociedad. Que Dios os bendiga.
Una vez finalizada la Santa Misa, nos dirigimos hacia el Pabellón Príncipe Felipe donde continuaron las celebraciones, a partir de las 12.45 horas, con un Acto Institucional, Parada Militar y entrega de condecoraciones.
En la tribuna de autoridades se hallaban situadas: la Delega del Gobierno en Aragón, Rosa María Serrano Sierra; El Subdelegado del Gobierno en Zaragoza, Fernando Beltrán Blazquez; el Jefe Superior de Policía de Aragón, Juan Carlos Hernández Muñoz; y el Comisario Jefe Provincial de Zaragoza Luis Fernando Pascual Grasa.
Igualmente asistieron, entre otras, las siguientes autoridades civiles: Justicia de Aragón, Ángel Dolado Pérez; Consejero de Hacienda y Administración Pública del Gobierno de Aragón, Carlos Pérez Anadón; Presidente del Tribunal Superior de Justicia de Aragón, Manuel Bellido Aspas; Arzobispo de Zaragoza, Carlos Manuel Escribano Subías.
Las autoridades Militares asistentes fueron, entre otras, las siguientes: Jefe de la División “Castillejos” GD. ET. Carlos Jesús Melero Claudio; Jefe de Movilidad Aérea del Mando Aéreo de Combate, GB. EA. José Luis Ortiz Cañavate; Jefe de la Brilog, GB. ET. Juan Carlos Olalla Simón; Delegado de Defensa en Aragón, Coronel ET. Conrado José Cebollero Martínez; Jefe de la Comandancia de la Guardia Civil en Zaragoza, Coronel José Antonio Mingorance Sánchez. Como Maestros de Ceremonias actuaron el Inspector Jefe de Policía Oscar David Escó Barcelona, Jefe de Gabinete del Jefe Superior de Policía de Aragón, y la Inspectora Beatriz Gambón Darquel, Jefa del Gabinete de Prensa.
La Delegada del Gobierno en Aragón, y en su nombre la Jefatura Superior de Policía de Aragón, nos dio la bienvenida a este acto institucional con motivo de la celebración de los Santos Ángeles Custodios, Patronos de la Policía Nacional.
El evento de este año cobraba un significado especial, pues la pasada edición tuvo que ser suspendida por el efecto de la pandemia, por lo que la entrega de condecoraciones del año 2020 se limitó a una serie de actos privados en dependencias de la Jefatura Superior, disminuyendo el realce que merece una ocasión tan especial, ya que no pudieron acudir familiares de los condecorados. Por este motivo en el acto de este día también se procedió a la entrega de los Diplomas concedidos el pasado año, para poner en valor, de manera pública, la meritoria labor de estos funcionarios y del personal ajeno a la corporación que obtuvieron el ingreso en la Orden al Mérito Policial.
La Jefatura Superior de Policía de Aragón, agradeció al Excelentísimo Ayuntamiento de Zaragoza, así como a los gerentes del Pabellón Príncipe Felipe, la cesión de este maravilloso espacio para que todos pudiéramos disfrutar de este acto, cumpliendo con las medidas preventivas frente al Covid 19, tanto de aforo como de distancia social, dictadas por las autoridades sanitarias, algunas de las cuales habían obligado a modificar y adaptar momentos de la celebración.
A pie de pista se hallaba situada una formación policial, con un centenar de agentes, en representación de cada una de las tres capitales de provincia y localidades donde está presente la Policía Nacional en nuestra región. Integraban la formación de policía las siguientes Unidades: Jefatura Superior de Policía de Aragón; Unidad de Policía Nacional Adscrita a la Comunidad Autónoma; Comisaría Provincial de Zaragoza; Comisaría Provincial de Huesca, con Huesca, Jaca y Canfranc; Comisaría Provincial de Teruel; Comisaría Local de Calatayud; Undécima Unidad de Intervención Policial UIP; Grupo de Operaciones Especiales de Seguridad GOES; Técnicos en Desactivación de Explosivos NRBQ; Unidad Especial de Guías Caninos; Unidad Especial de Subsuelo y Protección Ambiental; Unidad de Prevención y Reacción UPR; Grupo Operativo de Respuesta GOR; Servicio de Atención al Ciudadano SAC, y Brigada Móvil de Policía del Transporte. Como novedad de este año, se contaba con la Unidad de Medios Aéreos, pilotando uno de los drones asignados a la Jefatura Superior de Policía en Aragón, que pudimos observar en la grada lateral, entre las puertas A y B. También se encontraba formada la Unidad de Música de la Academia General Militar, dirigida por el capitán Roberto Sancasto Calvo, a quien la JSPA agradeció muy sinceramente su presencia y su siempre inestimable colaboración.
La Policía Nacional, organización de ámbito nacional, con Unidades y servicios uniformados, garante de las libertades públicas y la seguridad ciudadana, por Real Decreto 927/2015, de 16 de octubre, fue honrada con el uso de la Bandera de España en sus actos conmemorativos, como estímulo para el cumplimiento del servicio público encomendado. El 23 de febrero de 2016 tuvo lugar el acto de concesión del uso de la Bandera de España a la Jefatura Superior de Policía de Aragón.
A continuación, continuando con el esmerado protocolo establecido, la Bandera nacional, símbolo de la unidad de España, se incorporó a la formación con los honores y escolta que establece el Real Decreto, acto acompañado de los acordes del Himno nacional, para el que se rogó a los presentes se pusieran en pie, en actitud de máximo respeto y silencio. Se lanzó el grito de “Policía: VIVA ESPAÑA” y se escuchó el Himno de España.
Seguidamente hicieron su entrada en el recinto la Delegada del Gobierno de España en Aragón Rosa María Serrano Sierra y el Jefe Superior de Policía de Aragón, Juan Carlos Hernández Muñoz.
El Jefe Superior hizo entrega a la Delegada del Gobierno del bastón de mando, como símbolo del ejercicio de la autoridad, para que presidiera este acto.
La Delegada del Gobierno procedió a pasar revista a la formación, acompañada por el Jefe Superior de Policía de Aragón y por el Jefe de la Formación, mientras sonaban los acordes de la conocida Marcha Militar “El Abanico”.
A continuación tomó la palabra el Jefe Superior de Policía de Aragón, Juan Carlos Hernández Muñoz y aquí les ofrecemos un amplio resumen de su alocución:
“En primer lugar quiero agradecerles la presencia en este, tan emotivo, acto para nosotros y manifestarles la alegría que siento al poder dirigirme a ustedes aprovechando la celebración de la festividad de los Santos Ángeles Custodios, Patronos de la Policía Nacional, después de tanto tiempo sin actos sociales de ningún tipo debido a la pandemia del Covid 19”.“Aprovecho para recordar a todos los fallecidos como consecuencia de esta terrible enfermedad, así como a todos los que han padecido y padecen sus síntomas. Vaya dirigido a los familiares de los primeros nuestro más sentido pésame y a los segundos nuestros deseos de una pronta recuperación. Pero, como he dicho antes, este es un día para festejar que volvemos a poder reunirnos en sociedad. Por esta razón, aprovechando nuestra festividad, quiero felicitar a todos los miembros que integran la Policía Nacional en Aragón”.
“A los policías, a los funcionarios de los Cuerpos Generales y al personal laboral, ya que han demostrado de forma patente su enorme disponibilidad de forma sobresaliente en las aciagas circunstancias que nos ha tocado vivir en este último año y medio. No les quepa ninguna duda que nuestro sacrificado esfuerzo y el trabajo que aún estamos realizando ha contribuido en gran manera a paliar la cifra de fallecidos y el número de enfermos durante la pandemia”.
“Decenas de miles de actuaciones sanitarias desarrolladas durante este triste período; el ejemplar apoyo humanitario en la evacuación de colaboradores de España en Afganistán; las numerosas intervenciones en las catástrofes atmosféricas que últimamente azotan a España, como puedan ser las danas, la borrasca Filomena; las riadas o la erupción volcánica de la isla de La Palma, demuestran nuestra voluntad y nuestro compromiso de entrega y de servicio a los ciudadanos. Y todo ello se ha hecho sin dejar de hacer frente a los grandes desafíos que atacan la seguridad pública, como puedan ser el terrorismo, la delincuencia organizada, la ciberdelincuencia, la trata de seres humanos, la protección de los segmentos sociales más vulnerables o los intentos de romper nuestra Constitución de forma ilegal y con ello la unidad de España”.
“Todo este trabajo contribuye sin duda a que sigamos siendo una de las instituciones más queridas y apreciadas de España. Indudablemente, en muchas de estas actuaciones no hemos estado solos. Hemos participado junto a otros organismos e instituciones, colaborando y ayudando a los ciudadanos todo lo que hemos podido en estas desgracias que he relatado. Organismos e instituciones que, al igual que nosotros, han dado lo mejor de si mismas para paliar en lo posible los perjuicios que nos han acarreado. Las Fuerzas Armadas, la Guardia Civil, las Policías Locales, Protección Civil, los Servicios Sanitarios, Bomberos, Seguridad Privada, Asuntos Sociales, Servicios Geriátricos, Centros Logísticos, etc, etc, etc. son servicios a los que quiero felicitar en nombre de la Policía Nacional por su compromiso y el magnífico trabajo que han realizando en cuantas crisis estamos viviendo”.
“En el año 2020 no se pudo celebrar nuestra festividad por causas manifiestas. Por esta razón hoy se va a proceder a hacer entrega de los Diplomas que acreditan el ingreso en la Orden del Mérito Policial a las personas ajenas al Cuerpo y a los integrantes de la Policía Nacional que el año pasado ya recibieron su merecida medalla. “A ellos se van a unir en este acto otras siete personas ajenas a nuestro Cuerpo y sesenta y seis policías de Aragón. Por ello doy la enhorabuena y, no me cabe ninguna duda que en nombre de todos los que aquí nos encontramos, a los que de una u otra forma han ingresado en la Orden del Mérito Policial en sus distintas modalidades; al personal ajeno a la institución policial muchas gracias por su apoyo generoso, cooperación y respuesta inmediata a las constantes demandas que les hacemos, que sin duda contribuyen a aumentar nuestra eficiencia y transparencia”.
“Me gustaría que estas medallas sirvan para cimentar, aún más sólidamente, las buenas relaciones que la Policía Nacional mantiene con las instituciones que representáis. A vosotros, integrantes de la Policía Nacional de Aragón, también os doy la enhorabuena y os felicito por el excepcional trabajo que habéis y estáis desarrollando. Unos por hechos excepcionales de los que pusieron en riesgo su vida para salvar las de otros, y otros por los méritos que han puesto de manifiesto en su carrera profesional durante muchos años, que les han hecho valedores para tan alta recompensa. Vuestra entrega y sacrificio hacen que no solo nos sintamos orgullosos de todos vosotros sino que nos anima a seguir vuestro ejemplo en el cumplimiento de nuestra misión, que a fin de cuentas no es otra que al servicio de los demás”.
“Me gusta reconocer siempre, y eso lo hago en todos los actos de celebración de nuestra festividad que esas medallas que tanto os ha costado conseguir, una parte muy importante se la debéis a vuestra familia por el apoyo incondicional que os han brindado, y otra no menos importante al resto de los compañeros con los que servís a España, codo con codo, a diario”.
“La Policía Nacional es una institución que cuenta con casi dos siglos de antigüedad, en los que ha sabido adaptarse a los requerimientos de la sociedad y a las vicisitudes que en cada época han tenido que vivir. Somos ejemplo de la integración total de la mujer en todo tipo de servicios, donde ha alcanzado los puestos más altos de la cadena de mando; punteros en la adaptación de nuevos procedimientos y métodos de trabajo; vanguardia de los avances tecnológicos y científicos; Promotores de la cooperación internacional en la lucha contra la delincuencia; sensibles a las necesidades de las personas más vulnerables de nuestra sociedad; convencidos de valores éticos que nos identifican como Policías Nacionales que hacen que nuestro papel en la democracia sea crucial e imprescindible como ha manifestado S.M. el Rey Felipe VI. Desconozco a qué nos enfrentaremos en el futuro, pero no les quepa ninguna duda de que venga lo que venga allí estará la Policía Nacional para cumplir con su misión constitucional y proteger a nuestros conciudadanos”.
“Quisiera recordar en este año a todos los compañeros que se nos fueron, muchos de ellos en acto de servicio. Estoy seguro que gozan de las mieles del descanso eterno por el comportamiento ejemplar que durante toda su vida tuvieron. Deseo hacer una especial referencia a nuestros queridos jubilados que, lejos de olvidarse del Cuerpo al que sirvieron toda su vida, sienten y padecen con nosotros todas las circunstancias por las que atraviesa la Policía Nacional, buenas o malas, como si acabasen de entrar en el Cuerpo. Muchas gracias por habernos enseñado el camino a seguir, destacando la labor que los representantes sindicales han realizado este año, aportando ideas y sugerencias para mejorar las, tan difíciles, condiciones de trabajo de todos nosotros. Considero que ha sido muy positivo y beneficioso y les animo a continuar en esa línea de cooperación interna”.
“También quiero expresar nuestro más sincero agradecimiento a todas las personas, instituciones, empresas y entidades de Aragón que desinteresadamente han colaborado en los actos que estamos desarrollando con motivo de nuestra festividad, especialmente al Ayuntamiento de Zaragoza y a los gestores de este magnífico polideportivo en el que nos hallamos y que nos ha brindado toda clase de ayuda y colaboración. Felicitar especialmente a los compañeros que han hecho posible la celebración de este acto, y a los componentes de la Formación, también a la buena Banda que tiene la Academia General Militar, que nos ha brindado sus servicios para llevar este acto a buen fin, sobre todo a vosotros por la voluntariedad y las ganas de hacerlo bien”.
“A los Santos Ángeles Custodios, Patronos de la Policía Nacional, les pido que protejan a los Policías Nacionales y a sus familias, que nos ayuden en nuestra controvertida misión, pero también les solicito que acaben con esta maldita pandemia y cesen todas las catástrofes naturales que asolan España y al mundo. Les deseo a todos ustedes, en este magnífico día, mucha salud y felicidad. ¡FELIZ DÍA DE LA POLICÍA!”.
A continuación se procedió a la entrega de Diplomas de Ingreso en la Orden del Mérito Policial a los condecorados en el año 2020 y que no pudieron disfrutar de un acto público de reconocimiento. Diploma de Orden del Mérito Policial 2020, concedidos a miembros de la Guardia Civil, Fuerzas Armadas y personas ajenas a la Policía Nacional, entre ellas: Justicia de Aragón, Ángel Dolado Pérez; Magistrado Juez del Juzgado de Instrucción nº 5 de Zaragoza, Antonio Robledo Villar; Delegado de Defensa en Aragón, Coronel del ET. Conrado José Cebollero Martínez.
Luego se hizo entrega de los Diplomas de Orden del Mérito Policial 2020 concedidos a miembros de la Policía Nacional, entre ellos los siguientes: Inspector Jefe, Pedro Rodríguez Moreno; Inspector Vicente Herruz Zauría; Inspector, Roberto Gil Polo.
Se procedió a la lectura de las órdenes de concesión de condecoraciones de ingreso a la Orden del Mérito Policial 2021.
CRUCES AL MÉRITO POLICIAL CON DISTINTIVO BLANCO.
He aquí algunos de los condecorados:
Superintendente Jefe de la Policía Local de Zaragoza, Antonio Blas Soriano Hernández; Magistrado Juez Decano en Zaragoza, Roberto Esteban Pradas; Coronel del ET. Fernando Ruiz Idiago.
Seguidamente, Oscar David Escó dio lectura del siguiente y emotivo texto: La fría noche del 15 de diciembre del pasado año fue testigo de como una mujer se precipitaba al cauce del río Ebro a su paso por Zaragoza.
Uno de los funcionarios que colaboraban en las labores de rescate localizó a esta persona debatiéndose entre la vida y la muerte, a punto de ser engullida por la fuerte corriente de las aguas. Sin dudarlo un instante y con claro riesgo para su persona, se introdujo en el cauce logrando nadar hasta la mujer y traerla de vuelta hasta la orilla del río. Ambos fueron tratados por hipotermia al término de la intervención. Por todo ello se concede Cruz al Mérito Policial con Distintivo Rojo al Policía Oscar de la Fuente Díaz. Hace entrega la Delegada del Gobierno en Aragón.
Fue Beatriz Gambón quien intervino a continuación para dar lectura de otro hermoso texto que junto con el anterior, nos ayuda a reconciliarnos con la raza humana, vean: La tranquilidad de la tarde del 22 de noviembre del pasado año se vio interrumpida por la presencia de un individuo que, portando un revólver, intimidaba con disparar sobre los viandantes de una céntrica calle del casco antiguo de Zaragoza. La rápida respuesta de una de las patrullas comisionadas, junto con su templanza y determinación, permitieron detener al agresor, que no dudó en encañonar a la cabeza a los policías, apretando varias veces el disparador de su arma, que se encontraba preparada para hacer fuego. Por todo ello se concede Cruz al Mérito Policial con Distintivo Rojo, al Oficial de Policía Carlos Crespo Martínez y al Policía Luis Monteagudo Mozota. Hace entrega la Delegada del Gobierno en Aragón y el Jefe Superior.
A continuación se procedió a la entrega de Cruces con Distintivo Blanco, que recibieron buen número de policías, entre ellos Ángel Cortés Castejón (Tenor Lírico del CNP),.
Tomó la palabra luego la Delegada del Gobierno en Aragón, Rosa María Serrano Sierra, quien dijo lo siguiente: Queridos miembros de la Policía Nacional, es un honor estar hoy aquí presidiendo los actos de celebración de este día, vuestro día. Es un honor, admiración y orgullo, porque orgullo y admiración es lo que sentimos todos hacia vuestra labor diaria. Tras unos meses muy complicados, en los que hemos aprendido a lidiar con la incertidumbre que nos trajo esta maldita pandemia, llega el momento de celebrar y homenajear a quienes hacen del servicio público y la protección a los demás su modo de vida. Vosotros y vosotras que hoy celebráis el día de vuestro Patrón, los Santos Ángeles Custodios, dedicáis cada día a velar por nuestra seguridad y por nuestro bienestar. Por eso, daros las gracias es lo primero que quiero hacer en mi primera intervención como Delegada del Gobierno en Aragón, en un día tan importante para vosotros como es este. Los Cuerpos y las Fuerzas de Seguridad del Estado, y el Ejército sois mis principales aliados en la labor que me ha sido encomendada, y mi primera intención aquí es, y así os lo traslado, que contaréis en todo momento con una Delegada leal, entregada y justa.
Sois colectivos excelentemente valorados por los ciudadanos y sois garantes de que cada mañana disfrutemos de la libertad y el orden que caracteriza a nuestro país.
Hoy hemos entregado 77 Condecoraciones y 37 Diplomas, que refrendan vuestra magnífica labor. Me gustaría nombrar a todos y cada uno de ellos, pero permítanme que dedique unas palabras especiales a Oscar de la Fuente, Carlos Crespo y Luis Monteagudo, ya que se les ha impuesto la Cruz al Mérito Policial con Distintivo Rojo. Los tres pusieron en riesgo su propia vida cumpliendo con el compromiso que hicieron cuando decidieron entrar en el Cuerpo Nacional de Policía. Pero creo, humildemente, que su mérito y su recompensa es aún mayor, ellos os representan a todos vosotros.
Hoy son un ejemplo para toda la sociedad que encarna ese trabajo sacrificado, callado y discreto que nos ha convertido en una de las Comunidades más seguras de España y con menor índice de delincuencia. El Cuerpo Nacional de Policía dispone de casi 19.000 agentes en Aragón . Cada uno de vosotros sois un punto seguro al que acudir en cualquier momento. La Policía Nacional es asequible para los ciudadanos, y hace visible que las instituciones velamos por la seguridad y la convivencia. Es un privilegio teneros tan cerca, en nuestras calles, en nuestras plazas y al otro lado del teléfono, en cualquier circunstancia y en cualquier situación de riesgo. Vuestro trabajo durante la pandemia ha sido loable, reforzando vuestra actividad desde el primer día en aquellos meses de confinamiento tan complicados, y acompañando cuidando y protegiendo a personas vulnerables, sanitarios, y a todos los que os hemos necesitado. Apenas llevo dos meses como Delegada del Gobierno en Aragón pero ya he podido conocer el trabajo de algunas Unidades, como el Grupo de Operaciones Especiales, la Brigada de Seguridad Ciudadana, la de Subsuelo, Tedax, o los Guías Caninos, entre otras y considero un deber, para mi fundamental, el transmitir siempre a la sociedad aragonesa vuestra excelencia y el nivel de entrega y pasión que mostráis en vuestro día a día.
La Unidad de Intervención Policial recibió el pasado mes de abril la Corbata de la Orden del Mérito Civil por su trabajo. La Unidad, creada en el 2008, en Aragón, cuenta con más de 100 agentes y ha realizado cerca de 400 dispositivos de mantenimiento de la seguridad pública; más de 300 despliegues relacionados con eventos deportivos y ha tenido a más de 500 delincuentes detenidos.
Además es relevante vuestro papel en misiones internacionales, con implicaciones más complejas debido a su nivel de delincuencia; impecable y dificilísima ha sido la labor de varios de vosotros en Kabul. Gracias Carlos Carod Martínez y Daniel Duran Ramos por formar parte de un operativo que consiguió que cientos de personas salieran de Afganistán y puedan empezar de cero, sin ver amenazados sus derechos y sus vidas. Una vez más pusisteis la vida de las personas en el centro, anteponiendo su seguridad a la vuestra.
Sois una institución clave para hacer frente al reto que va a suponer en los próximos años el terrorismo, la ciberdelincuencia o las crecientes situaciones de riesgo biológico. Por eso y por la forma en la que hacéis todo este trabajo, con templanza, con valor, pensando en las víctimas y en los que están en la situación de indefensión, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado sois las instituciones más valoradas por los ciudadanos y tenéis un sitio preferente en el corazón de todos nosotros.
No quiero olvidarme tampoco de vuestros familiares, que aceptan con orgullo y lógicamente con preocupación vuestra vocación, mi cariño y mi respeto hacia ellos.
Me siento especialmente orgullosa que el Cuerpo de Policía de Aragón haya encendido el amor por esta vocación a las mujeres que hoy siguen la estela de aquellas 42 policías que en 1979 juraron su cargo por primera vez. Ahora, solo en Aragón, las mujeres Policías Nacionales sois ya 348 y representáis el 19 por ciento de la plantilla. Esta cifra es superior a la media española que se sitúa en un 16 por ciento.
Vosotras, que no rehusáis y que lleváis a gala vuestro uniforme, sois punta de lanza y ejemplo en estas guerras de gente franca y valiente. Vosotras y vosotros sois también pieza clave en otro de los asuntos con los que me he comprometido personalmente, la lucha contra la violencia de género. No puede haber escusas ni ningún grado de complicidad hacia quienes maltratan de cualquier forma a una mujer. La violencia solo engendra violencia y causa un dolor insoportable, físico y moral, que no debemos tolerar.
Este año han sido asesinadas en nuestro país 35 mujeres. Desde el año 2003 el número alcanza las 1113 mujeres asesinadas. En Aragón, Katia y Fátima han pasado a formar parte de esta macabra estadística de 2021. Katia tenía un hijo, Fátima 3. Hoy les envío todo mi cariño a ellos, a sus familiares y a sus amigos. La violencia de género es una preocupación importante para todos los que estamos al frente de las instituciones y para el conjunto de la sociedad. Todos debemos estar involucrados en la lucha contra quienes asesinan a inocentes, dejando rotas para siempre a sus familias. Debemos de seguir avanzando para mejorar nuestras leyes y mejorar al máximo nuestros recursos con los que contamos las administraciones públicas. Desde la Delegación del Gobierno, desde la Unidad de Violencia de Género de esta Delegación, trabajaremos y colaboraremos con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, porque salvar la vida de una mujer merece el mayor de los respetos y de los esfuerzos.
La Policía Nacional sois un referente en esta lucha, en contra de esta lacra. Trabajáis sin descanso para detectar estos casos cuanto antes y dar una respuesta rápida y segura , que pasa por la atención y protección integral de la víctima. Las Unidades de atención a la familia y mujer, hacéis un trabajo magnífico, respetuoso y transversal, en el que cada agente da un plus que nunca podremos agradecer, porque el afecto, la compañía y el cuidado que ponéis para reconstruir y curar a estas mujeres y a sus hijos es loable.
Nada empobrece más a una sociedad que la intransigencia y la sinrazón. Por eso, ojalá llegue el día en el que no tengáis que ser un referente en esta lucha, porque no exista. También llegará el día en el que la ciudadanía podamos todos, por fin, volver a disfrutar de nuestras Fiestas del Pilar. Por segundo año consecutivo, la labor conjunta de la Policía Nacional, la Guardia Civil, la Policía Local, Bomberos, Protección Civil, y otros efectivos del Gobierno de Aragón, van a ser fundamentales para garantizar que se respeten los aforos y que la programación de los actos transcurra con total normalidad.
Son días de muchísimo trabajo para vosotros y mi confianza en vuestro buen hacer y en vuestro trabajo es total.
Zaragoza es una ciudad ejemplar y este es el momento de volver a demostrarlo. También lo somos como españoles porque podemos sentirnos muy orgullosos de que nuestro país esté a la cabeza de la vacunación internacional, un proceso ordenado y liderado por el Gobierno, en el que la Policía Nacional ha librado un papel sumamente importante, ayudando a distribuir las vacunas desde los primeros días y custodiando con celo y seguridad el proceso. Concluyo ya. Hoy vuestro trabajo refleja el deber cumplido, pero sé que en vosotros, cada día, nacerá la ambición de seguir trabajando ante los desafíos y las incertidumbres que os deparará el futuro. Convertís esos momentos duros en estímulos que potencian vuestro trabajo en beneficio de esta sociedad compleja y plural como es la nuestra.
En nombre del Subdelegado en Zaragoza, D. Fernando Beltrán y en el mio propio, gracias por ser nuestros principales aliados en nuestro deber de servir y proteger a la sociedad aragonesa, y principalmente gracias por ser guardianes de algo tan preciado como es nuestra libertad y nuestra seguridad. Felicidades a todas y a todos.
Después de esto, La Delegada del Gobierno dijo lo siguiente: Policías Nacionales, repetid conmigo: ¡VIVA ESPAÑA! ¡VIVA EL REY! ¡VIVA LA POLICÍA NACIONAL
El estruendo de numerosos y fuertes aplausos generalizados llenó por completo el pabellón Príncipe Felipe cuando todos nosotros contestamos a esos gritos.
El Maestro de Ceremonias, Oscar David Escó intervino para decir esto: Un acto como el que celebramos hoy estaría vacío de contenido sin recordar a quienes dieron su vida prestando servicio como Policías Nacionales. A continuación, con el más profundo respeto y desde el recuerdo perenne, haremos entrega de una ofrenda en homenaje a los integrantes de la Policía Nacional fallecidos en acto de servicio.
El Tenor Lírico del CNP, Ángel Cortés Castejón, dio lectura de esta preciosa oración “Si morir fue su destino, lo abrazaron con valor, contra el crimen, como escudo, se enfrentaron llevando sobre su pecho, nuestra placa y nuestra fe. Nuestra placa, que es divisa de personas entregadas. Nuestra fe por la justicia, en la lucha con honor. El crimen nuestro enemigo, el criminal las mató, más marcaron con su ejemplo el camino por recorrer. Gloria aquí, ángel abatido, centinela eterno a la libertad. No busquéis entre el polvo sus despojos, son luceros que nos marcan el rumbo que debemos seguir. Luceros azules que alumbran la noche, azules guardianes de la libertad.
Después, Ángel Cortés cantó, con admirable voz, la parte central de la oración cristiana La muerte no es el final, compuesta por el sacerdote español Cesáreo Gabarain Azurmendi, elegida en 1981 como Himno a los Caídos de las Fuerzas Armadas Españolas.
La Delegada del Gobierno y el Jefe Superior de Aragón depositaron la corona delante del monolito que nos recuerda a los que, en paz o en guerra, dieron su vida por España.
El Arzobispo de Zaragoza, Monseñor Carlos Manuel Escribano Subías rezó la siguiente oración: Que el Señor de la vida y la esperanza, fuente de salvación y paz eterna, les otorgue la vida que no acaba, en feliz recompensa por su entrega. Que así sea.
En medio de un profundo silencio, escuchamos el Toque de Oración y, llegados al punto ejecutivo, saludamos con respeto y admiración a quienes nos precedieron en el servicio a España.
El Maestro de Ceremonias, Oscar David, dio lectura del siguiente texto: Mediante Resolución del 27 de octubre de 2016, de la Dirección General de la Policía, se dio carta de naturaleza al Himno de la Policía Nacional, reflejo de valores, principios, entrega y dedicación de cuantos integramos el Cuerpo Nacional de Policía. El personal uniformado, y todo aquel que desee acompañarnos, rogamos se pongan en pie para cantarlo y escucharlo.
De nuevo, el Tenor Lírico del CNP, Ángel Cortés, nos deleitó con su hermosa voz al cantar el Himno de la Policía Nacional, acerca del cual traemos aquí una breve reseña, extraída de Gesinpol:
Desde el año 2016, la Policía Nacional tiene nueva letra para su Himno oficial. Bajo el título “Tesón de hierro”, esta letra fue seleccionada entre 420 presentadas al concurso realizado por el Ministerio del Interior para renovar la letra, que no se tocaba desde el año 1948. El anterior Himno fue un auténtico símbolo de identidad del Cuerpo de la Policía Nacional, hasta que su evolución y composición hicieron que su antigua letra quedara obsoleta y con necesidad de ser renovada para adaptarse a los nuevos tiempos. Se buscaba una nueva letra que identificara y transmitiera los actuales valores y principios. El autor del actual Himno es el barítono, compositor y Maestro de canto, José Manuel Conde.
Después de la interpretación del Himno escuchamos, una vez más, numerosos y fuertes aplausos, al término de los cuales la Maestra de Ceremonias Beatriz Gambón dijo lo siguiente: La Bandera nacional, que ha presidido este acto, se retira de la formación con los honores que establece la normativa. Rogamos continúen en pie mientras mantenemos una actitud de máximo respeto y silencio.
El Jefe de la formación se dirigió a la tribuna presidencial y solicitó permiso, para finalizar el acto, a la Delegada del Gobierno, que lo dio por concluido con las siguientes palabras: Muchísimas gracias a todos por su asistencia.
Finalizaron así los actos solemnes de celebración de la festividad de los Santos Ángeles Custodios, Patronos del Cuerpo Nacional de Policía, y con ellos finalizó una maravillosa jornada que tuvimos el honor y el placer de vivir junto a los policías de Aragón, ya saben, los que guardan la tapia.
Desde estas sencillas líneas de los Reales Tercios de España, creados en 1942 por S.A.R. Don Juan de Borbón y Battemberg, felicitamos a la Jefatura Superior de Policía en Aragón, en la persona de su Jefe Superior, Juan Carlos Hernández Muñoz, por el que sentimos gran respeto y afecto, por la impecable organización de los actos, que alcanzaron gran brillantez y solemnidad.
Igualmente, queremos expresar nuestro agradecimiento a los Jefes de Ceremonia, Oscar David Escó y Beatriz Gambón, por la exquisita cortesía de la que fuimos objeto durante los actos y por las infinitas facilidades que nos han dado para la confección del presente trabajo informativo.