En la zaragozana Iglesia de San Juan de la Cruz, tuvimos el placer de escuchar el pasado 19 de diciembre de 2021 el concierto que anualmente nos ofrece la prestigiosa Coral Polifónica El Soto, con motivo de la Navidad.
Queremos hacer una pequeña retrospectiva recordando otra magnífica actuación de la coral, acontecida dos meses antes, en octubre del mismo año, con motivo de la celebración de la Patrona de la Guardia Civil. Publicamos en su día la nota de prensa que facilitó la Jefatura de la 8ª Zona de la GC. a los medios de comunicación social, referida al acto, y hoy no queremos dejar pasar la oportunidad de completar aquella información.
La Coral Polifónica El Soto, dirigida por Ana Val Claraco, acompañó la celebración de la Santa Misa, en la Basílica del Pilar, interpretando, en las distintas secuencias de la misma, un bello conjunto de composiciones musicales de inspiración religiosa. La coral estuvo acompañada al órgano por José María Verdejo, director musical de las catedrales de Zaragoza.
Una vez finalizado el oficio religioso, quisimos hablar un momento con la directora de la coral, y para ello nos dirigimos al espacio del Coro Mayor, un sobrio conjunto de sillería y órgano, hecho en madera de roble y protegido por una verja manierista, en la que se representa la vida de Cristo y de la Virgen.
Le preguntamos a Ana Val qué había supuesto para la coral el haber acompañado a la GC en la celebración de su Patrona, y esto es lo que nos respondió: Para nosotros hoy era un día muy especial porque el año pasado, a causa de la pandemia, no pudimos venir a cantar. Hacía dos años que no participábamos en esta misa de la Guardia Civil. Entonces, tras la pandemia y todo lo que hemos vivido, ha sido una felicidad y un soplo de aire fresco el poder volver a cantar, aunque sea con mascarilla, gel hidroalcohólico y distancia de seguridad. Ha sido una maravilla, la verdad.
Como testimonio de aquella jornada les traemos dos imágenes, una de la coral y otra de su directora junto con el Coronel Alfonso Mollá Lorente, en aquel entonces Jefe del Centro Deportivo Socio-Cultural Militar El Soto, sede de la coral.
Volvemos ahora a la Iglesia de San Juan de la Cruz y al Concierto de Navidad, para decir que antes de la actuación musical de la coral se celebró la Santa Misa, oficiada por el párroco, R.V. Antonio González López, carmelita descalzo, que nos recibió con las siguientes palabras:
Hoy nos acompaña la Coral Polifónica El Soto que, con su música, nos va a ayudar a vivir con gozo esta celebración ya cercana a la Navidad.
Comenzamos encendiendo la cuarta vela de Adviento. La Virgen y San José con su fe, esperanza y caridad, nos invitan a vivir con alegría. No hay rechazo, ni frío, ni oscuridad, ni incomodidad que les pueda separar del amor de Cristo que nace. Ellos son los benditos de Dios que lo reciben.
Dios no encuentra mejor lugar que aquel pesebre porque allí está el amor inmaculado del hombre.
Cuando encendemos estas cuatro velas nos unimos a la Virgen y San José con un sincero deseo de renunciar a todo lo que impide que Jesús nazca en nuestro corazón. Y con ese deseo de renunciar a cuanto sea obstáculo entre Dios y nosotros, comenzamos poniéndonos ante Dios pidiéndole perdón por nuestros pecados, invocando su misericordia. De la profecía de Miqueas, “Esto dice el Señor: Y tú Belén Efrata, pequeña entre las aldeas de Judá, de tí voy a sacar al que ha de gobernar Israel; sus orígenes son de antaño, de tiempos inmemoriales.
Por eso el Señor abandonará Israel hasta que dé a luz la que ha de dar a luz. Entonces el resto de sus hermanos volverá junto con los hijos de Israel. Se mantendrá firme, pastoreará con la fuerza del Señor, con el dominio del nombre del Señor, su Dios; se instalarán, ya que el Señor se hará grande hasta el confín de la tierra. El mismo será la paz. Palabra de Dios.
En el Salmo, todos contestamos: ¡Oh Dios! Restáuranos, que brille tu rostro y nos salve.
De la carta a los hebreos. Hermanos, al entrar Cristo en el mundo dice “ Tú no quisiste sacrificio ni ofrendas pero formaste mi cuerpo. No aceptaste holocausto ni víctimas expiatorias, entonces yo dije, he aquí que vengo, pues así está escrito en el comienzo del libro acerca de mí, para hacer ¡Oh Dios! Tu voluntad”.
Se dio lectura del santo evangelio según San Lucas: En aquellos días María se puso en camino y fue aprisa a la montaña a un pueblo de Judá. Entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel.
En cuanto Isabel oyó el saludo de María saltó la criatura en su vientre. Se llenó Isabel del Espíritu Santo y dijo a voz en grito: “¿Quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor?. En cuanto tu saludo llegó a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre. Dichosa tu, que has creído, porque lo que te ha dicho el Señor se cumplirá”.
En la Homilía, el R.V. Antonio Gozález dijo lo siguiente: El evangelio de hoy nos deja en primer lugar un icono, una imagen que nos invita a contemplar la Virgen María que lleva ya a Cristo en sus entrañas. Se pone en camino presurosa, parece que el mismo Cristo, desde dentro, la impulsa a ponerse en camino al encuentro de su prima Isabel. Es como un anuncio profético, esa iglesia en salida de la que habla el Papa Francisco, esa iglesia que, llevando a Cristo en sus entrañas, está llamada a ponerse siempre en camino, no quedarnos donde estamos, no quedarnos en nuestras comodidades, no quedarnos en lo que ha salido sino ponernos en camino al encuentro.
Una imagen también para estas fiestas que se acercan y que van a ser momento, para muchos de nosotros, de encuentro con familiares y amigos. Y aquí vemos este encuentro en el que María contagia el Espíritu Santo que lleva consigo y contagia la alegría. Un encuentro en el que María e Isabel hablan de lo que está sucediendo en sus vidas. Ojalá también nosotros, en estos días, sepamos vivir encuentros así, encuentros para compartir lo que verdaderamente es importante para nosotros, momentos para transmitir alegría. Momentos incluso para transmitir nuestra experiencia y lo que Dios va haciendo en la vida de nosotros, para extender a los que están cerca de nosotros también la alegría y una chispa de ese deseo de encontrarnos con Cristo.
En ese encuentro brota esa palabra, la primera bienaventuranza que encontramos en el evangelio de San Lucas, “dichosa tú, que has creído, porque lo que te ha dicho el Señor se cumplirá”. Una palabra que también se nos invita a coger, encontrarnos con Cristo, poner nuestra confianza en él, apoyarnos en él. Cuando intentamos hacer muchas cosas, solo desde nuestras fuerzas, pronto encontramos el cansancio ante las dificultades, ante las cosas que no salen como esperábamos.
Felices si vivimos desde la fe, si nos apoyamos en el Señor que nos acompaña y cuya palabra, a veces no en el momento que esperamos, a veces no por los caminos que pensábamos, pero su palabra, su promesa de vida siempre se cumple.
Y nos deja la liturgia también otra palabra que hemos escuchado en la carta a los hebreos: “aquí estoy ¡Oh Dios! para hacer tu voluntad”. Es la palabra con la que el Hijo de Dios entra en nuestra historia. La palabra de María también es el: “hágase en mi según tu palabra”.
La actitud de José es un silencio que escucha y pone color a lo que Dios le manda. Son como acordes que van al unísono con esta palabra del Hijo. Y el autor de la carta a los hebreos nos está diciendo que ese es el sentido del culto y de toda vida cristiana, ese hacernos presentes a Dios, “ aquí estoy, (con esa actitud de disponibilidad), para hacer tu voluntad”.
Que la Navidad que vamos a celebrar, el encontrarnos con Cristo que viene a nosotros pequeño, haga nacer en nosotros esa actitud, la haga crecer en nosotros. Que en estos días acojamos también a María que con Cristo en las entrañas viene a nuestros hogares, que nos trae ese saludo capaz de llenarnos de alegría, del que nos ha hablado la profecía de Miqueas. Él, Cristo, es nuestra paz.
La Santa Misa estuvo acompañada en sus distintos pasajes por los bellos cánticos de la Coral Polifónica El Soto, que interpretó las siguientes composiciones de significación religiosa: JESU BLEIBET MEINE FREUDE; KYRIE; BENEDICAT VOBIS; AVE MARÍA; HEILIG,IST DER HERR; AGNUS DEI; PANIS ANGELICUS.
Al finalizar el oficio religioso, subió al ambón el portavoz de la coral, Jesús Meléndez Collado y, estando situados sus componentes en el espacio frente al altar, hizo la siguiente presentación: Vamos a ofrecerles una especie de mini concierto de Navidad porque ha concluido el cuarto domingo de Adviento, tiempo de preparación para la Navidad, y queremos darles esta guinda, esta apertura de puertas a unas fechas tan entrañables. Navidad, como saben, significa nacimiento y ese va a ser nuestro punto de referencia. Queremos agradecer a la comunidad y al Padre Antonio que hayan tenido el gesto de permitirnos venir a cantar aquí, a la Iglesia de San Juan de la Cruz, porque para nosotros es un regalo y queremos hacerlo extensivo a todos ustedes. Somos la Coral Polifónica El Soto, pertenecemos al Centro Deportivo Socio-Cultural Militar El Soto y estamos al lado del Ebro, en La Almozara.
Si los quieren conocer, estos son sus componentes:
Línea de Bajos; Tenores; Cuerda de Contralto y Cuerda de Soprano. Todos los grupos, de cualquier tipo o índole, necesitan una persona que dirija, una persona que controle, que enseñe, que quiera, que esté contigo, que te anime. Nosotros no nos equivocamos cuando decidimos que el destino artístico de nuestra coral lo tenía que llevar una persona con talento y una persona muy profesional, ella es Ana Val Claraco.
Hizo su entrada la directora de la coral y Jesús Meléndez Collado nos ofreció, a partir de este momento la presentación de las distintas piezas del concierto, que fueron interpretadas con arreglo al siguiente orden:
NULLA AMICITIA SINE MUSICA. Significa “no hay amistad sin música”, y este bien podía ser uno de esos momentos. Muchas de las personas que aquí estamos no nos conocíamos, pero bien puede ser este el momento en que elegimos un punto de amistad. Es obra de un compositor belga, Johan Duijck, y nosotros la escenificamos como si fuese nuestro abrazo musical.
PUER NATUS IN BETHLEHEN. Música escrita por Julio Domínguez, compositor español, gallego. Hay que estar muy atentos porque hay episodios de la obra que nos pueden sorprender pero que armónicamente son una maravilla.
TRES MOTETES. Seguramente la palabra motete, habrá algunas personas a las que no les diga nada. Motete es una palabra que viene del francés motet y que se refiere a unas composiciones musicales que arraigaron en Francia desde los siglos XII y XIII, que consistían en unos cantos que se hacían a cuatro voces en las iglesias, pero con la particularidad de que no tenían acompañamiento instrumental, es decir se hacían como llamamos comúnmente “a cappella”. Pues bien cogiendo ese formato musical, este compositor, el mismo del tema que hemos escuchado antes, Julio Domínguez, hizo una música para Navidad con tres motetes: LAUDATE DOMINUM, (Adorado sea el Señor); LUX FULGEBIT, (Luz que brilla); GLORIA PATRI, (Gloria al Padre).
Y hasta aquí llega la música moderna. Vamos a entrar ahora en esos villancicos que seguramente ya habremos escuchado alguna vez porque tienen un cierto tono autonómico. De hecho el primero de ellos lo compuso un sacerdote de Paniza, que fue una persona ilustre en Zaragoza y tiene una calle dedicada, que va desde el parque del Tío Jorge hasta el Ebro. Nos referimos a Mosen Domingo Agudo, y el villancico se titula, DURMIENDO AL NIÑO.
El segundo villancico, como decía, tiene un cierto tono autonómico pues es un villancico con aires de jota. ¿Y donde se canta la jota?, pues normalmente se canta en la ribera del Ebro, hacia arriba, Rioja, Navarra y por supuesto Aragón. Es un villancico que nos da un punto de esperanza sobre todo y de fortaleza también. Nos podrán venir cosas malas pero siempre hay que tener fuerza para seguir adelante. Y además no hay que pedirlas, vienen solas.
Entenderán esto si les digo que el villancico se llama, SI LLUEVE QUE LLUEVA, (V. Ordoñez/C.Serrano).
No podía faltar, al menos, un villancico clásico y, puestos a escoger, hemos elegido el villancico de la humanidad. Es un villancico que se estrenó el 24 de diciembre de 1818 en Oberndorf, un pequeño pueblecito de Austria. El párroco de la iglesia se quedó sin órgano, porque se estropeó, y le dijo a su amigo Franz Gruber: mira a ver si haces una composición, aunque sea para guitarra, y podemos cantar algo el día de Nochebuena, si no esto va a ser un desastre. Y así se hizo, él le dio la letra e hizo la composición musical. Ahí empieza la historia de este villancico que ha llegado hasta nosotros y que en 2011 fue proclamado por la UNESCO Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Se trata de NOCHE DE PAZ.
Con esta última interpretación finalizaba el programa del concierto de Navidad pero, los fuertes, espontáneos, generalizados y persistentes aplausos del numeroso público asistente, hizo que la coral nos regalase una nueva actuación. Así lo anunció Jesús Meléndez Collado: Vamos a cantar otro villancico, “vengan fieles”. Es un Himno que en la bendición de Navidad, desde el siglo XVIII, se viene cantando en todos los países de nuestro entorno, y que se titula “ADESTE FIDELES”, (Juan IV de Portugal).
Una vez finalizado el concierto, hablamos unos momentos con Ana Val, Directora de la Coral Polifónica El Soto y le formulamos algunas preguntas, que reflejamos aquí junto con sus respuestas:
¿Cuál ha sido el devenir artístico, musical, de la coral en este año 2021?. Ha sido un año algo complicado, en cuanto que ha sido un resurgir después del confinamiento y de los meses tan duros que hemos pasado, han sido unos meses de reconstruir, de volver a empezar. Pero ha sido también muy enriquecedor porque hemos aprendido a trabajar de una manera más autónoma, pues en los ensayos estábamos cantando, cada coralista, a metro y medio de distancia, con mascarilla, y ha sido todo un reto. Poco a poco se han ido incorporando coralistas que habían dejado de venir por la situación pandémica y, tras muchos meses de esfuerzo y de trabajo duro, hemos podido llegar a ofrecer este concierto. Un concierto que ha sido un poco al límite porque, debido a la crecida del Ebro, no hemos podido celebrar el concierto en el Club Social El Soto, en nuestra sede, que es donde originariamente lo íbamos a realizar y esto ha supuesto que nos tuviéramos que recomponer, buscar otra vez un lugar de ensayo, buscar un lugar para realizar el concierto y, finalmente, gracias a la generosidad de la parroquia de San Juan de la Cruz, ha sido posible tanto continuar con los ensayos como haber tenido la oportunidad de cantar en un paraje tan maravilloso como es esta iglesia.
¿El cantar con mascarilla menoscaba algo el resultado artístico de las actuaciones?. En cierto modo sí, porque es muy complicado y es un poco incómodo para los coralistas cantar con una mascarilla, y para mi como directora es también un impedimento en cuanto a que se pierde parte de la información visual que yo en una situación normal ofrezco al coro puesto que cuando dirijo lo hago también con mi cara, con mi expresión facial, lo cual implica también la boca, los labios, cuando abro la boca para dar una entrada o para ayudarles a respirar y ahora mismo con mascarilla esa ayuda o esa información no se la puedo ofrecer. Eso requiere intensificar todavía más el trabajo de ensayo ya que durante el concierto solo me valgo del gesto y de mi posición corporal para darles las indicaciones interpretativas que ellos necesitan.
¿Algún proyecto inmediato, o a medio plazo?. Si, a medio plazo, a finales de enero, participaremos en un encuentro coral con otros coros de Zaragoza, que nos han invitado a participar, y en cuanto finalicen las vacaciones de Navidad empezaremos a ensayar muy duro para hacer ese repertorio, que nada tendrá que ver con lo navideño, lo cual también es empezar a trabajar ya a un ritmo exigente puesto que en dos, tres semanas, tendremos ese concierto.
Pues con estas respuestas de Ana Val Claraco, directora de la Coral Polifónica El Soto, finalizamos nuestra particular crónica sobre el Concierto de Navidad 2021, gracias al cual retornamos a nuestros hogares con el ánimo más reconfortado y el espíritu más elevado.