El pasado día 4 de mayo de 2024, en la Inmortal Ciudad de Zaragoza, tuvo lugar la solemne ceremonia de Jura de los nuevos Caballeros y Damas de la Real Maestranza de Caballería de Zaragoza, presidida por el Teniente de Hermano Mayor de esta prestigiosa Corporación Nobiliaria, Excmo. Sr. D. Luis Navarro y Elola, y por S.A.R. Don Pedro de Borbón-Dos Sicilias y Orleans, Duque de Calabria, Conde de Caserta y Jefe de la Casa Real de las Dos Sicilias.
En la casa Palacio de la Real Maestranza de Caballería de Zaragoza, sede de la Nobleza aragonesa, se desarrolló a partir de las 11.00 horas, este importante acto en el que realizaron su juramento ocho Caballeros y una Dama, que ingresaban en el Real Cuerpo. La mesa de jura estaba compuesta por: Teniente de Hermano Mayor de la RMCZ, Excmo. Sr. D. Luis Navarro y Elola; S.A.R. Don Pedro de Borbón-Dos Sicilias y Orleans; Caballero Fiscal Ilmo. Sr. D. Joaquín Cavero y García Rivero, Conde de Gabarda; Caballero Secretario, Ilmo. Sr. D. Enrique Caro y Valenzuela; Capellán de nombramiento de este Real Cuerpo, Ilmo. y Rvdo. Ruben Ruiz Silleras, Vicario General de la Archidiócesis de Zaragoza.
Asistieron al acto representaciones de las siguientes corporaciones y asociaciones: Real, Antiquísima y Muy Ilustre Cofradía de Nobles de Nuestra Señora del Portillo de Zaragoza; Real Cuerpo de la Nobleza de Madrid; Real Cuerpo de la Nobleza de Cataluña; Real Estamento Militar del Principado de Gerona; Orden Ecuestre del Santo Sepulcro de Jerusalén; Sacra y Militar Orden Constantiniana de San Jorge; Real Asociación de Hidalgos de España; Reales Tercios de España.
Entre las muchas personalidades asistentes, pudo verse a: Excma. Sra. Dª Pilar González de Gregorio y Álvarez de Toledo, de la Casa Ducal de Medina Sidonia; Excma. Sra. Dª María Soledad Descartín, Marquesa viuda de Valdeolivo; Ilma. Sra. Marquesa de Ballestar; Ilmo. Sr. Barón de Mora; Ilma. Sra. Marquesa de Lácar; Excma. Sra. Duquesa de Medina de Rioseco.
En el Salón de Tenientes, escenario principal del acto, antes de comenzar la ceremonia, el Teniente de Hermano Mayor dijo esto: Alteza Real, Excmos. e Ilmos Señores, Señoras y Señores, buenos días a todos, antes de comenzar esta segunda sesión de la Junta General de nuestro Santo Patrono el Señor San Jorge, con la Jura de nuevos Caballeros y Dama, vamos a cumplimentar a nuestro Augusto Hermano Mayor, S.M. el Rey Don Felipe VI, ruego se pongan en pie.
El Excmo. Sr. D. Luis Navarro y Elola, y S.A.R. Don Pedro de Borbón-Dos Sicilias y Orleans, procedieron a descubrir el retrato de S. M. el Rey Don Felipe VI, secuencia que es costumbre realizar al inicio de todas las sesiones y actos que celebra la RMCZ.
A continuación, Don Luis Navarro y Elola dio la palabra al Caballero Secretario, Ilmo. Sr. D. Enrique Caro y Valenzuela para que procediera al llamamiento de los Caballeros y Dama que aguardaban el momento de la Jura en un salón contiguo.
El Secretario llamó al primero de los Caballeros, Señor Don Jaime López-Doriga, González-Valerio, Monjardin y Alós, apadrinado por el Ilmo. Sr. D. Francisco Javier del Arco y Carabias Méndez.
El Caballero postulante y su padrino avanzaron, precedidos por el Caballero Fiscal, hacia la mesa de jura, donde el Caballero Secretario, Ilmo. Sr. D. Enrique Caro y Valenzuela, dio lectura del siguiente texto: Señor, obra en esta Real Maestranza la Real aprobación de nuestro Hermano Mayor S.M. el Rey Don Felipe VI a su expediente de ingreso en este Real Cuerpo según acuerdo de las juntas Generales correspondientes, lo que esta Tenencia de Hermano Mayor se complace en comunicarle para su conocimiento, que conste su ingreso en esta Real Maestranza, pueda acreditar su calidad de Caballero de la misma, usar su insignia y gozar de cuantas indulgencias y privilegios le son concedidos a los individuos de esta Real Corporación.
De la misma manera, se le comunica que estará obligado a cumplir las disposiciones establecidas en nuestras vigentes Ordenanzas, aprobadas en 1922, por S.M. Alfonso XIII, y los acuerdos aprobados en la Junta del Real Cuerpo. A 4 de mayo de 2024. El Teniente de Hermano Mayor, Luis Navarro y Elola, El Fiscal Joaquín Cavero y García Rivero, Conde de Gabarda, y el Secretario Enrique Caro y Valenzuela.
El Capellán de la RMCZ, Ilmo. y Rvdo. Sr. D. Rubén Ruiz Silleras, inquirió al Caballero la siguiente fórmula de juramento:
¿Juráis defender la fe católica, apostólica, romana, y cumplir las Ordenanzas y Resoluciones de este Real Cuerpo?.
El Caballero, con la mano derecha en alto, contestó SI JURO. Y el Capellán le respondió: si así lo hiciereis, Dios os lo premie, y si no, os lo demande.
Poniendo su mano sobre los Santos Evangelios, el Caballero pronunció las siguientes palabras:
“Hago pleito de homenaje, una, dos, tres veces y las demás en Derecho necesarias conforme al Fuero de España y a la Ley de Caballero, de obedecer en todo como su fiel vasallo al Rey nuestro Señor Felipe VI, Hermano Mayor de esta Real Maestranza, y a sus sucesores en la Monarquía y en esta Real Orden, y en su nombre a su Teniente, que es o fuere, en todo lo concerniente a la observación y cumplimiento de las Ordenanzas y Resoluciones de este Real Cuerpo, para su mayor honor y aumento”.
A continuación, el Teniente de Hermano Mayor le impuso la venera de la Real Corporación y le hizo entrega del documento acreditativo, tras lo cual el Caballero pasó a ocupar su lugar de precedencia en el acto.
Seguidamente, con este mismo rito ceremonial realizaron su juramento de ingreso en la RMCZ las siguientes Personas: Excmo. Sr. D. Fernando José Martínez de Irujo, Fitz James Stuart, Artazcoz y Silva, Marqués de San Vicente del Barco, Grande de España, representado por el Excmo. Sr. D. Santiago María de Ybarra y Churruca, Conde de El Abra, apadrinado por el Excmo. Sr. D. Luis Navarro y Elola.
Sr. D. Javier Allen desalazar, Ruiz de Arana, Travesedo y Montalvo, apadrinado por el Excmo. Sr. D. Santiago María de Ybarra y Churruca, Conde de El Abra.
Sr. D. Patricio Morenés, Hoyos, Álvarez de Eulate y Peña, apadrinado por el Sr. D. Fernando Ferraz y Español.
Sr. D. Galo Morenes, Hoyos, Álvarez de Eulate y Peña, apadrinado por el Ilmo. Sr. D. José María Sancristóval Zurita.
Sr. D. Javier Semprun, de Castellane, de la Quintana y Rodríguez-Rivas, apadrinado por el Ilmo. Sr. D. José María Sancristóval Zurita.
Ilmo. Sr. D. Cristóbal Castillo, de Latorre, Ybarra y Téllez-Girón, apadrinado por el Sr. D. Jaime Olaso Latorre.
Sr. D. Carlos Pujadas, Descartín, de la Sota y Cristellys, apadrinado por el Excmo. Sr. D. José María de Arias y Sancristóval.
Sra. Dª María Luisa de Escalada, Marqués, Barrera-Caro y Le Senne, amadrinada por la Ilma. Sra. Dª María de la Concepción Navarro y Elola.
A continuación, en representación de todos los Caballeros y Dama Maestrantes que habían jurado, el Ilmo. Sr. D. Cristóbal Castillo de Latorre, Ybarra y Tellez Girón dirigió unas palabras de agradecimiento a la RMCZ
Alteza Real, Excmo. Sr. Teniente de Hermano Mayor, Caballeros y Damas Maestrantes, creo que hablo en nombre de todos al transmitir el honor y agradecimiento de los Caballeros y Dama que hoy prestamos juramento para entrar a formar parte del elenco de esta Real Maestranza de Caballería de Zaragoza, cuyo Hermano Mayor es Su Majestad el Rey, que Dios guarde muchos años.
En siglos pasados estas Corporaciones Nobiliarias, constituidas por Nobles y Caballeros, apoyaban a sus Señores Reyes en la conquista de nuevos terrenos y en la defensa de España, así como de la Fe católica y de la Corona. En la Cofradía de Caballeros Infanzones de San Jorge, cuna de esta Real Maestranza, estaban integrados muchos Nobles del antiguo Reino de Aragón, que se distinguieron durante el transcurso de la Guerra de la Independencia y más concretamente en los Sitios de Zaragoza de 1808 y 1809.
En agradecimiento al apoyo mostrado por la Cofradía, el 25 de octubre de 1819, Su Majestad el Rey Fernando VII tuvo a bien premiar la valentía mostrada por aquellos Nobles, elevando al rango de Real Maestranza a la Cofradía de Caballeros Nobles de San Jorge, nombrando como primer Teniente de Hermano Mayor al Excmo. Sr. D. Pedro Ignacio Jordán de Urriés y Palafox, Marqués de Ayerbe.
Es en ese legado de honor y sacrificio donde hoy asumimos nuestro compromiso con la noble misión de nuestra Real Maestranza. Entender y enorgullecernos de nuestro pasado es fundamental, y no existe mejor forma de hacerlo que mostrar agradecimiento a las generaciones que nos preceden, conociendo que nuestra labor radica en hacer prevalecer lo que nos une, la defensa de la Fe Católica, de la Patria y de la Corona, comportándonos en nuestra vida con la dignidad propia de los miembros de esta Real Maestranza de Caballería de Zaragoza.
Por último, me gustaría terminar este agradecimiento recordando a mi abuelo, José María de Latorre, Marqués de Montemuzo.
Y leyendo unos versos que mi abuela, Ángela María Téllez Girón, Duquesa de Osuna, también Dama de esta Real Maestranza, me enseñó a muy temprana edad.
Después de leer unos bonitos versos, el Caballero Ilmo. Sr. D. Cristóbal Castillo, de Latorre, Ybarra y Téllez Girón continuó con las siguientes palabras: Bajo el manto protector de nuestra Patrona, la Virgen del Pilar, y la guía de nuestro venerado Patrón San Jorge, nos comprometemos a preservar los nobles ideales que han guiado a nuestra Orden durante siglos. Para finalizar me gustaría reiterar nuestro agradecimiento a Su Alteza Real, al Excmo. Señor Teniente de Hermano Mayor y a todos los Caballeros y Damas Maestrantes de esta Real Corporación que nos han acompañado en tan entrañable acto. ¡VIVA ESPAÑA! ¡VIVA EL REY!
Cerró el acto el Excmo. Sr. D. Luis Navarro y Elola, Teniente de Hermano Mayor de la Real Maestranza de Caballería de Zaragoza, pronunciando el siguiente discurso: Alteza Real, Excmos. e Ilustrísimos Señores, Señoras y Señores, es un honor para mí como Teniente de Hermano Mayor presidir hoy nuestra tradicional ceremonia de Jura, recibiendo en este solemne acto a los nuevos Maestrantes de Zaragoza. Hoy damos la bienvenida a los nuevos Caballeros y a la Dama que han elegido nuestra Real Maestranza de Caballería de Zaragoza para dar testimonio de su nobleza y de su compromiso con los valores e ideales de la Noble Caballería, de la que nuestra Real Maestranza quiere ser expresión permanente.
Nuestros nuevos Maestrantes están vinculados por sangre a linajes muy arraigados en nuestro Real Cuerpo y han consolidado con sus incorporaciones la presencia histórica de sus familias, formalizándola con su juramento y adhesión y con su firme compromiso para contribuir al fortalecimiento de nuestra institución. Todos los Maestrantes que hoy han ingresado y a los que se les ha impuesto nuestra Venera, la Cruz de Iñigo Arista, cuentan con méritos suficientes para formar parte de nuestra Real Corporación.
Y cumplen y han probado todos los requisitos impuestos por nuestras Ordenanzas. Todos ellos tienen una valía personal sobrada para asegurar el nivel de exigencia de nuestra Real Maestranza, que preside Su Majestad el Rey. Nuestra Real Corporación tiene un ilustre pasado y con la incorporación de nuevos Maestrantes, que se unen para compartir nuestros valores, se asegura su futuro.
Entráis hoy a formar parte, como miembros de pleno derecho, de la Real Maestranza de Caballería de Zaragoza, una de las cinco Reales Maestranzas del Reino de España. Los rasgos propios de nuestro Real Cuerpo, que han jurado hoy los nuevos Maestrantes y que han sido al tiempo renovados por quienes ya lo éramos, constituyen nuestras esencias e ideales que todos compartimos; en primer lugar la defensa de la unidad, grandeza y libertad de España, simbolizadas por el caballo, colaborador imprescindible otrora para conseguirlo, y en el manejo del cual debíamos ser Maestrantes, esto es, Maestros. Y todo ello dentro de la obediencia y defensa de la Monarquía, simbolizada por la Corona Real. Nosotros Maestrantes, estamos siempre dispuestos a defender con nuestra sangre si fuera preciso, como hicieron nuestros predecesores en muchas ocasiones, el que siempre fue nuestro ideario, Dios, la Patria y el Rey.
Una Corporación Nobiliaria carece de razón de ser si su finalidad empieza y termina con la simple reunión de personas nobles. Hay que mantener vivos los valores propios de la Nobleza, el honor, el patriotismo, la generosidad, la honradez, el valor, el servicio, la lealtad y los valores del humanismo cristiano.
Todo ello con una absoluta lealtad a la Corona. Estamos viviendo en España tiempos convulsos y complicados en todos los ámbitos. La Monarquía como institución está siendo objeto en los últimos años de duros ataques por parte de determinados sectores e incluso, en ocasiones, de otros poderes del Estado. Y ello precisamente debido al significativo papel que la Corona desempeña en nuestra sociedad y en nuestro ordenamiento jurídico como símbolo de la unidad y permanencia del Estado y como garante de la Constitución refrendada de manera mayoritaria, que hace más de cuarenta años supimos darnos los españoles bajo la magistral dirección del entonces Rey Don Juan Carlos I, y al que todos los españoles debemos gratitud.
El próximo 19 de junio se cumplen diez años de la proclamación como Rey de España de Su Majestad Don Felipe VI, que Dios Guarde muchos años. Ha sido una década de la historia de España muy complicada en muy diversos ámbitos, en la cual nuestro Rey ha desempeñado una intensa y eficaz labor que merece nuestro agradecimiento y admiración, y que hay que dar a conocer y recordar a los españoles, con especial énfasis en los jóvenes. Con este objetivo, la Diputación de la Grandeza de España en colaboración con la Real Academia de la Historia y Patrimonio Nacional, va a organizar una exposición en el Palacio Real de Madrid con el título “FELIPE VI. UNA DÉCADA DE LA HISTORIA DE ESPAÑA”, entre los meses de junio y septiembre de 2024.
Esta exposición tendrá lugar en otras ciudades de España entre octubre de 2024 y junio de 2025, con una duración de unas seis semanas en cada ciudad. Zaragoza, capital de la antigua Corona de Aragón y sede de nuestra Real Maestranza, es una de ellas, y tendremos el honor de que nuestra casa Palacio de la Real Maestranza de Caballería de Zaragoza sea el espacio donde tenga lugar la citada exposición, con posterioridad a la de Palacio Real.
Como Maestrantes, debemos apoyar con lealtad y generosidad a la Corona y, en estos tiempos tan difíciles, es especialmente necesario resaltar la enorme labor que desempeña Su Majestad el Rey Don Felipe VI. Como Corporación Nobiliaria española que somos, y así se contempla en nuestras Ordenanzas, estamos obligados a la defensa de la Patria y de Su Majestad el Rey, nuestro Hermano Mayor y Jefe Supremo. Esto forma parte de nuestras esencias, como ya hemos dicho anteriormente, y no debemos olvidarlo nunca, y menos aún en estos tiempos.
Desde hoy lucís sobre el pecho nuestra venerada Divisa, la Cruz Blanca de Íñigo Arista, Blasón Real, Emblema personal, Signum Regis del Monarca de Aragón desde Pedro IV el Ceremonioso, y que nos fue concedida por Su Majestad el Rey Don Alfonso XIII, por Real Decreto de 14 de diciembre de 1908. Venera que debéis enarbolar como la Cruz de guía en vuestras actividades diarias. La Nobleza tiene hoy razón de ser si es ejemplo en la vida diaria de los valores morales y patrióticos, la Nobleza es también la del corazón y buenos sentimientos.
Es la ayuda desinteresada, es callar antes de ofender, es aceptar a las personas por lo que son y no por lo que uno quiere que sean.
La Nobleza requiere un corazón puro y de buenas intenciones, saber reconocer los aciertos ajenos y los errores propios. Hemos de tratar de ser los mejores, de buscar la excelencia y el mérito como referentes, pero la excelencia y el mérito deben ser calidades valoradas a la hora de ingresar además de, y repito, además de nuestras tradicionales pruebas de nobleza de sangre a Fuero de España, establecidas por las sucesivas Pragmáticas de nuestros Señores Reyes a lo largo de la historia y nunca derogadas, y reconocidas por nuestras Ordenanzas, y que constituyen un patrimonio histórico, cultural e inmaterial de España.
Pertenecer a una Real Maestranza o a una Orden Militar no confiere privilegio alguno ni otorga Nobleza, solamente reconocemos, comprobamos y calificamos la nobleza de los linajes con absoluto rigor previa la prueba nobiliaria correspondiente, tal como establecen las Ordenanzas que hemos jurado cumplir.
La Real Maestranza de Caballería de Zaragoza busca destacar en la cambiante sociedad actual, como nuestros antepasados supieron hacerlo en la suya, y no perder de vista en ningún momento los ideales que constituyen nuestra razón de ser. Intentamos ser serios, ejemplares y competitivos además de leales. Como nos ha recordado en alguna ocasión Su Majestad el Rey Don Felipe VI, nuestro Augusto Hermano Mayor, citando una frase de su antecesor Alfonso X el Sabio, “lealtad es cosa que dirige a los hombres en todos sus hechos para que hagan siempre lo mejor”. Os animo por tanto a hacer siempre lo mejor, a ser buenos Caballeros y Damas en toda la extensión de significado que estas palabras suponen, y que nuestro Santo Patrón el Señor San Jorge, nos ayude a cumplir lo que hemos prometido.
Y el Excmo. Sr. Teniente de Hermano Mayor levantó la sesión y cerró la Junta General del Señor San Jorge de 2024.
Los actos continuaron en la Catedral de San Salvador, la Seo, de Zaragoza, con la celebración de la Santa Misa.
Fue oficiada por el Vicario General de la Archidiócesis de Zaragoza, Capellán de Nombramiento de la Real Maestranza de Caballería de Zaragoza, Ilmo. y Rvdo. Sr. D. Rubén Ruiz Silleras. Con él concelebró el Rvdo. D. Ignacio Sebastián Ruiz, Canónigo Capellán Mayor de la Seo de Zaragoza.
Asistieron las siguientes autoridades civiles y militares:
General Jefe de la 8ª Zona de la Guardia Civil, G.B. Excmo. Sr. D. Francisco Javier Almiñana Boluda; Jefe Superior de Policía de Aragón, Excmo. Sr. D. Florentino Marín Parra; Coronel Jefe del Regimiento “Pavía” 4, Ilmo. Sr. D. Victor Manuel Vela Rodríguez; Coronel Jefe del Regimiento de Caballería “España” 11, Ilmo. Sr. D. Javier Fernández Guillén; Coronel Jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Zaragoza, Ilmo. Sr. D. Germán Avilés Cabrera; Comisario Jefe Provincial de Zaragoza, Ilmo. Sr. D. Francisco Javier Abadía Tirado; Coronel del E.A. Ilmo. Sr. D. Carlos Antonio Vicente Murcia, en representación del Gene ral Jefe de Movilidad Aérea.
Se dio lectura del libro del Apocalipsis: Yo, Juan, oí una gran voz en el cielo, ya llega la victoria, el poder y el reino de nuestro Dios y al mando de Su Cristo el Mesías…
Se leyó un fragmento del Santo Evangelio según San Juan: En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: Si el mundo os odia, sabed que me ha odiado a mí antes que a vosotros…
Les ofrecemos ahora, queridos lectores que nos siguen, algunos párrafos extractados de la Homilía del Rvdo. Rubén Ruiz Silleras: Damos gracias a Dios por la vida de los que hoy os habéis comprometido en este acto formal y solemne a cumplir las Ordenanzas y todos estos compromisos tan enormes que tenéis. Fijaros que al celebrar hoy a San Jorge, nuestro Santo Patrón que, como todos los Santos y Santas que han creído en Jesús, nos invitan a todos a poner nuestros ojos y nuestro corazón en la misma dirección, en mirar a Jesús el Señor.
Acabamos de escuchar que Jesús el Señor ya nos anunció, a los suyos y a nosotros, que aquel que fuera seguidor suyo no iba a triunfar, que quizás el mundo, o alguno, le iba a señalar por incitarse con, como, cristianos. La palabra de Jesús tiene que ser para nosotros aliento en nuestra vida cotidiana. Como Maestrantes y como cristianos no tenemos que dejar que crezca en nosotros el desaliento y el pesimismo.
¿Qué mundo vamos a cambiar, qué sociedad vamos a construir si nos sumamos a las voces que solo anuncian catástrofes?. Cada época histórica ha tenido sus peculiaridades, las que han de venir en las generaciones siguientes tendrán las suyas y, muy posiblemente, las sociedades y nuestra propia iglesia quizás cambien y sean muy distintas. Pero este tiempo es el nuestro, el que nos ha tocado vivir y por tanto en esta peregrinación estamos todos viviendo y caminando hasta que un día el Señor nos llame. En el día a día es donde tenemos que demostrar que somos testigos de Jesús y que debemos colaborar a hacer una sociedad justa. Ojalá que todos, se lo pedimos también a San Jorge, tengamos una actitud de anti derrotista y de esperanza. Y con ilusión vamos a dar lo mejor para dejar a los que vengan detrás una sociedad mejor, y podamos dejar, entre todos, el legado de la fe, que no se extinga nuestra fe.
Y ahora vamos a hacer la colecta. Ya saben que uno de los valores de la Maestranza es la generosidad, y por tanto como en otros años esta ayuda irá a Cáritas Zaragoza para ayudar a los más necesitados.
Finalmente, veneramos con una inclinación de cabeza ante ella, la Reliquia de San Jorge, trasladada exprofeso a la Catedral desde la RMCZ para seguir esta tradición.
Posteriormente, y de nuevo en la casa Palacio del Real Cuerpo, tuvo lugar la recepción de autoridades e invitados. El Teniente de Hermano Mayor pronunció las siguientes palabras: Excelentísimos e Ilustrísimos Señores, Señoras y Señores, al presidir un año más esta ceremonia en honor de nuestro Santo Patrón San Jorge, quiero expresar como Teniente de Hermano Mayor de esta Real Maestranza de Caballería de Zaragoza, y de todos sus Caballeros y Damas, y del mío propio, el agradecimiento a Vuestra Alteza Real y a todas las autoridades eclesiásticas, civiles, militares, Corporaciones Nobiliarias, Títulos del Reino e invitados que nos honran con su presencia. Muchas gracias a todos por vuestra presencia, cariño y afecto para nuestra Real Maestranza, que preside Su Majestad el Rey Don Felipe VI, nuestro Augusto Hermano Mayor y primer Caballero. Y ahora, como es costumbre en todos nuestros actos, vamos a realizar un brindis antes de comenzar, así es que les ruego que rellenen sus copas.
Su Alteza Real, Don Pedro de Borbón-Dos Sicilias y Orleans, pronunció el siguiente brindis: Vamos a hacer un brindis por nuestro Hermano Mayor, ¡POR EL REY! ¡POR ESPAÑA!
Después de que el Rvdo. D. Rubén Ruiz Silleras bendijera los alimentos que íbamos a tomar, disfrutamos de una espléndida comida coctail ofrecida en los regios salones de la Real Maestranza de Caballería de Zaragoza, prolongándose la sobremesa hasta bien entrada la tarde.