El pasado día 26 de mayo de 2022, jueves, en una sencilla pero emotiva ceremonia, la Real, Antiquísima y Muy Ilustre Cofradía de Nobles de Nuestra Señora del Portillo hizo ofrenda de un Manto a la Santísima Virgen del Pilar.
El acto tuvo lugar en el Camarín de la Virgen, de la Catedral-Basílica de Nuestra Señora Virgen del Pilar a las 18.30 horas, presidido por el Arzobispo de Zaragoza, Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Carlos Escribano Subias, que estuvo asistido por el R.V. Sr. D. Jesús Gracia Losilla.
La RCNPZ, había celebrado a finales del pasado mes de marzo su Capítulo General en la Iglesia de Nuestra Señora del Portillo de Zaragoza. En dicho capítulo se aprobaron los últimos Expedientes de Ingreso de Damas y Caballeros. Posteriormente el Caballero Fiscal informó de que a partir de ahora y en aras a la igualdad, las Damas jurarían como los Caballeros para incorporarse a la Real Cofradía. También se preparó la ceremonia de jura 2022 para nuevos Caballeros y Damas y se fijó la fecha de la Ofrenda del Manto de la RCNPZ a la Santísima Virgen del Pilar.
Los actos continuaron con la visita al Excmo. y Rvdmo. Sr. Arzobispo Metropolitano de Zaragoza, D. Carlos Escribano Subías, Gran Prior de la Cofradía, a quien se impuso la Venera de la Real Cofradía, así como al Capellán Mayor de la Corporación, Rvdo. Sr. D. Jesús Gracia Losilla.
En el acto de ofrenda del Manto a la Virgen estuvieron presentes los siguientes dignatarios de la Cofradía: Hermano Mayor, Excmo. Sr. D. Juan-Gualberto de Balanzó y de Solá; Caballero Fiscal, Excmo. Sr. D. Luis Navarro y Elola; Teniente de Hermano Mayor, Ilmo. Sr. D. Arturo Guillén Bruned; Clavera Mayor, Ilma. Sra. Dña. Pilar Ximénez de Embún y Sancristóval; Maestro de Ceremonias, Ilmo. Sr. D. Francisco Javier del Arco y Carabias-Méndez, así como numerosos miembros de la Cofradía y de la Real Maestranza de Caballería de Zaragoza.
Los Reales Tercios de España, fundados en 1942 por S.A.R. Don Juan de Borbón y Battenberg, estuvieron representados por D. Manuel Grao Rivas, Jefe de Relaciones Institucionales del Tercio Norte-Aragón.
La Clavera Mayor de la Cofradía, hizo ofrenda de un bello centro floral a la Virgen, que fue depositado a los pies de la Sagrada Imagen. El Caballero Fiscal y el Teniente de Hermano Mayor, portaron el precioso Manto de la RCNPZ hasta el Camarín donde fue bendecido por el Arzobispo de Zaragoza y a continuación el Capellán de la Virgen, D. José María Bordetas vistió con él a Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza.
El Hermano Mayor, Excmo. Sr. D. Juan-Gualberto de Balanzó y de Solá rezó la siguiente oración a la Virgen: Madre y Señora Nuestra, henos aquí rendidos a tus pies a los Caballeros y Damas de la Real Cofradía de Nobles de Nuestra Señora del Portillo, emocionados por ofreceros el Manto con la Cruz de Sobrarbe en recuerdo del gran milagro que realizasteis para que la milicia del Rey Alfonso I de Aragón defendiese el Portillo creado por los atacantes de Zaragoza. Desde entonces una imagen vuestra preside una iglesia, aquí en Zaragoza, en recuerdo de tan memorable suceso bajo la advocación del Portillo, pues allí aparecisteis y allí os veneramos. Aquí en la Caesaraugusta de la Hispania Romana, ocurrió un hecho trascendental.
Se encontraba el Apóstol Santiago acompañado de un grupo de discípulos atribulados por la resistencia y el rechazo a su predicación conforme avanzaban hacia el noroeste por la cuenca del Ebro. Se hallaban desalentados por la falta de frutos pese a sus denodados esfuerzos, por lo que sintieron la tentación de abandonar y volverse por donde habían venido.
Justo en esos momentos, intervinisteis Vos, Madre y Señora.
Antes de vuestra Dormición y Asunción a los cielos en carne mortal, os encontrasteis con el atribulado grupo junto a una columna de jaspe. Con vuestra presencia viva, les disteis los ánimos que necesitaban para perseverar pese al aparente fracaso.
Gracias a Vos Madre, aquel grupo de misioneros inició la evangelización de España y, más tarde, del mundo entero. Y además le dijisteis al Apóstol: “He aquí, hijo Santiago, el lugar señalado y dedicado a honrarme, y en memoria mía, sea mi iglesia edificada. Atiende a este Pilar que me acompaña porque ciertamente mi Hijo y tu Maestro lo ha enviado del alto Cielo, por manos de los Ángeles”.
Y aquí estás y estarás Madre Nuestra por siempre y hasta el fin de los tiempos, pues esta tierra aragonesa y española es, como dijo San Juan Pablo II, TIERRA DE MARÍA. Te imploramos ¡oh Madre de esperanza! que veles especialmente por España, hoy muy atribulada y confundida. Te pedimos por nuestro Protector, S.M. el Rey Don Felipe VI; por nuestro Hermano Mayor Honorario Don Pedro de Borbón, Duque de Calabria; por nuestro Gran Prior D. Carlos, Arzobispo Metropolitano de Zaragoza; por D. Jesús, nuestro Capellán Mayor, por todo el Cabildo de esta Santa Basílica y por los Caballeros y Damas Nobles de Nuestra Real Cofradía.
Así mismo te pedimos que guíes nuestros pasos, los de nuestras familias, nuestros amigos y nuestros descendientes por el recto camino de la Fe, la Esperanza y la Caridad como buenos cristianos. Te rogamos también por los enemigos de la Cristiandad para que encuentren la luz y sean capaces de escuchar las enseñanzas de Tu Divino Hijo, Nuestro Señor.
Finalmente, reina de la Paz, te rogamos que por tu intercesión finalicen todas las guerras que hoy hieren nuestro mundo y especialmente por la agredida Ucrania y por sus agresores, distintos de la Rusia que también te venera en el Santuario de Kazán.
Que Nuestra Señora del Pilar nos de Fortaleza en la Fe, Seguridad en la Esperanza y Constancia en el Amor.
Finalizó Don Juan-Gualberto de Balanzó y de Sola la oración con el rezo de la Jaculatoria a la Virgen del Pilar: Bendita y alabada sea la hora en que María Santísima vino en carne mortal a Zaragoza. Sea por siempre bendita y alabada.
A continuación, una vez finalizada la parte más solemne del acto, el Arzobispo de Zaragoza y el Hermano Mayor de la Cofradía firmaron en el Libro de Honor de la Catedral-basílica, un precioso volumen ricamente encuadernado y repujado en plata, que se guarda en la Sacristía de la Virgen, construida en 1754 por iniciativa del Arzobispo Francisco Ignacio de Añoa y Busto, sobre diseños de Ventura Rodríguez.
He aquí lo que ambos escribieron. Arzobispo de Zaragoza: Doy gracias a Dios por poder participar en este momento solemne de la Real Cofradía de Nobles de Nª Sª del Portillo de Zaragoza en el que se ha entregado un precioso Manto a la Virgen del Pilar. Las dos advocaciones marianas nutren la fe de los zaragozanos. Pedimos a nuestra Madre que nos bendiga y proteja siempre. Carlos Escribano, Arzobispo de Zaragoza y Gran Prior de la Cofradía, 26-V-2022
Hermano Mayor de la Cofradía: En este día que la Virgen del Portillo visita y se queda para siempre con Nuestra Señora del Pilar. Que España y los españoles y todo el orbe encuentren en la Virgen del Pilar la columna para sostenerse ante los ataques del mal y que Nuestra Señora la Virgen del Portillo nos lo abra cuando nos llegue la hora de la reunión con Jesús y María. Postrados a vuestras plantas, os pedimos Señora que siempre nos acompañéis en todo momento. Viva la Virgen del Pilar. Viva la Virgen del Portillo. Viva España y nuestro católico Rey. Zaragoza 26 de mayo de 2022. Juan-Gualberto de Balanzó y de Solá, Hermano Mayor de la Real Cofradía de Nobles, de Nuestra Señora del Portillo en el día de imposición del Manto de Nuestra Señora del Portillo a la Virgen del Pilar, Patrona de España.
Finalizó así el acto y nosotros felicitamos al Hermano Mayor de la RCNPZ por su brillante organización, y le agradecemos profundamente su invitación al mismo.