Un año más hemos tenido el honor de ser invitados, por la Lugartenencia de la España Oriental y por la Sección de Aragón, de la Orden Ecuestre del Santo Sepulcro de Jerusalén, para asistir a los actos de celebración de la festividad de Nuestra Señora Reina de Palestina, Patrona de la Orden.
Tuvieron lugar dichos actos en la capital aragonesa el pasado 17 de diciembre de 2021 y se desarrollaron en tres espacios distintos, iniciándose a las 13.00 horas, en la Iglesia de San Gil Abad, con la celebración de la Santa Misa, oficiada por el párroco y Caballero eclesiástico de la Orden, R.V. Mario Gallego Bercero, asistido por el R.V. Ángel Briz Fernández, Capellán Castrense de la Brigada Aragón I, de la Base San Jorge, del Hospital General de la Defensa, y rector de la Parroquia Castrense de San Fernando.
Presidió la Santa Misa el Lugarteniente del Capítulo Noble de Aragón, Cataluña y Baleares, Lugartenencia de España Oriental, Excmo. Sr. D. Juan Carlos de Balle y Comas, acompañado del Maestro de Ceremonias de la Lugartenencia y miembro del Consejo, Ilmo. Sr. D. José María Parcerisa y Norta.
A la celebración asistieron, encabezados por el Presidente de la Sección de Aragón, Ilmo. Sr. D. Carlos de Corbera y Tobeña, los Caballeros Ilmos. Srs. D. Wifredo Rincón García, D. José María Turmo Molinos, D. Juan Luis Doncel Paredes, D. Luis Miguel Tobajas Asensio y D. Carlos Sauras Herrera, y las Damas Ilmas. Sras. Dª María Teresa Villarreal y Nogués y Dª Patricia Sisó y Terraza, junto a una representación de la Delegación de la Orden en Tarragona, encabezada por su Delegada, la Ilma. Sra. Dª María Merce Martorell Comas, quien estuvo acompañada por los Caballeros Ilmos. Srs. D. Antón-Lluis Rull Hortaneda, D. Joaquim Juliá Panedés y D. Carlos Guinovart Vergés, y de la Sección Navarra, presidida por el portavoz de su Comisión Gestora, el Caballero Ilmo. Sr. D. José Ángel Zubiaur Carreño, acompañado de su esposa Dª Uxue Mayans y de Urmeneta y el Caballero Ilmo. Sr. D. Carlos Álvarez de Furundarena.
Por motivo de las restricciones impuestas por la pandemia, se acordó para este año reducir en la medida de lo posible la asistencia, y no se pudo contar con representantes de las Ordenes y Corporaciones Nobiliarias aragonesas como habitualmente, restringiendo también la asistencia de invitados.
Los Reales Tercios de España, fundados en 1942 por S.A.R. Don Juan de Borbón y Battenberg, estuvieron representados por D. Manuel Grao Rivas, Jefe de RR.PP. e Institucionales del Tercio Norte-Aragón.
La Santa Misa se inició con la procesión de entrada de los Caballeros y Damas, por la vía sacra a los acordes del órgano mayor de la parroquia, y precedidos por el estandarte de la Sección, que fue portado por el Caballero Comendador Ilmo. Sr. D. Juan Luis Doncel Paredes, aplicándose la Santa Misa en sufragio del alma de los Caballeros, Damas y familiares fallecidos en el último año.
Dª María Merce Martorell, Delegada de la Orden en Tarragona, leyó, del libro del Génesis, el pasaje que así comienza: Después que Adán comió del árbol, el Señor llamó al hombre:¿Dónde estas?. Él contestó: Oí tu ruido en el jardín, me dio miedo, porque estaba desnudo y me escondí…
Dio lectura luego al Salmo responsorial y todos contestamos: cantad al Señor un cántico nuevo porque ha hecho maravillas…
A continuación el R.V. Ángel Briz leyó el Santo Evangelio según San Lucas: En aquel tiempo, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la estirpe de David, la virgen se llamaba María…
He aquí algunos pasajes de la Homilía del R.V. Mario Gallego: En medio del tiempo de Adviento, hacemos un alto en el camino para honrar a María, siempre virgen, bajo el título de Reina de Palestina. No es fácil para mí dirigirme a vosotros, siempre me es difícil predicar, pero hay veces que es todavía más difícil. Estamos nosotros en un tiempo de Adviento difícil, un tiempo de mucha reflexión, de mucho miedo, de mucha distancia personal. A eso han ido los obispos a Roma, a decirle al Santo Padre: así estamos, ¿qué tenemos que hacer, cómo tenemos que obrar, cual sería la orientación del espíritu para este tiempo nuestro?. Por eso oramos también por los obispos en esta mañana, pidiéndole al Señor que los ilumine, que les haga fuertes en la fe, en la esperanza y especialmente que escuchen al Espíritu Santo para que los caminos que él marque sean siempre caminos de santidad, caminos de verdad y caminos de amor, porque si algo necesita este mundo es reconocer que son amados, o que somos amados, de una forma infinita por parte de Dios.
Estamos en un tiempo aterrador. Un pequeño bichito ha descompuesto a toda la sociedad entera. Salimos huyendo con pánico, no hablamos por miedo, no nos saludamos por miedo.
No hacemos nada por miedo. y esto es alejarse del espíritu de hermandad, es alejarse del Espíritu de Dios, y hay que saber que tenemos que compartir el Espíritu Santo con cuanto nos rodea.
Me parece que somos como aquellos apóstoles de Emaús, que salen corriendo porque peligra la vida. Solamente el Señor sale al encuentro para decirles no corráis, descansad aquí en Emaús, no tengáis miedo yo estoy con vosotros, yo soy el Espíritu, yo soy el Cristo Salvador. También nosotros tenemos que dejar de huir.
Estamos celebrando prácticamente la Navidad, hemos puesto el belén y vemos aquel pequeño niño con sus padres pidiendo en aquel mesón, ¿me dejáis dormir?, ¡no hay sitio para vosotros en el mesón, hay sitio para otros, para vosotros no hay sitio!. En cuantos hermanos nuestros ya no cabe el Señor, ya no hay sitio para él en nuestro mesón. Lo podemos adornar con muchas flores y muchas luces pero hay un niño que ha nacido en un pesebre y no había sitio para el en el mesón. Que no quedemos también nosotros en ese lugar, diciendo no hay sitio para el Señor, porque no hay sitio para el hermano, para el que sufre, para el que muere, para tanta gente. Recordaréis seguramente dos escenas que a mí me dejaron bloqueado; el Santo Padre paseando por la Plaza de San Pedro, lloviendo por la noche, él solo, como testimonio de la soledad, del abandono, de la distancia, o aquel otro momento en el que tres niños, sin la madre, hacen un Vía Crucis por la Plaza de San Pedro, ellos solos.
Hermanos míos, el mundo tiene necesidad de nosotros, el mundo tiene necesidad de Cristo, el mundo tiene necesidad de Dios, y somos nosotros quienes tendremos que comunicar con Dios. ¿Que habrá que rectificar muchas cosas?, rectifíquense, ¿que habrá que dejar muchas cosas por obsoletas?, que salgan de nuestras vidas, pero sobre todo centrar nuestra vida en aquel que es nuestro único y solo Salvador.
Don Carlos de Corbera y Tobeña, Presidente de la Sección de Aragón, subió al ambón y rezó con todos los presentes la Oración Universal, pidiendo al Señor:
Para que la fe en Jesús sea en toda su iglesia cada vez más profunda; para que todos los hombres de buena voluntad, de cualquier creencia o convicción, sepan colaborar unos con otros en pro de la justicia y de la paz; para que los niños y adolescentes encuentren el ambiente de cariño, comprensión y ayuda que necesitan; para quienes en nuestra ciudad realizan los trabajos más duros y menos considerados, tengan nuestro reconocimiento y nuestra consideración; por nuestra querida Orden Ecuestre del Santo Sepulcro de Jerusalén y por sus dirigentes para que, con la ayuda e intersección de la Virgen Reina de Palestina, continuemos ayudando a nuestros hermanos, que viven en Tierra Santa, en todas sus necesidades; y por la Lugartenencia de la España Oriental y por los Caballeros y Damas que formamos parte de ella; y especialmente por todos los que nos hemos reunido hoy aquí para celebrar la fiesta de la Virgen Reina de Palestina, Patrona de la Orden, que ella nos guarde y nos proteja siempre.
Luego, el Lugarteniente de la España Oriental, Excmo. Sr. D. Juan Carlos de Balle y Comas, invitó a los allí reunidos a leer juntos la Oración del Caballero y la Dama del Santo Sepulcro, que reza así: Señor, por tus cinco llagas que llevamos en nuestra insignia te pedimos: Danos la fuerza de amar a todos los hombres del mundo que tu padre ha creado, y sobre todo a nuestros enemigos. Libra nuestra mente y nuestro corazón del pecado, de la parcialidad, del egoísmo y de la vileza para ser dignos de Tu sacrificio.
Haz descender sobre nosotros, Caballeros y Damas del Santo Sepulcro, Tu espíritu para que nos haga convencidos y sinceros embajadores de paz y de amor de entre nuestros hermanos y, particularmente, entre los que piensan que no creen en Ti.
Danos la Fe para afrontar todos los dolores de la vida cotidiana y para merecer un día estar humildemente, pero sin temor, en Tu presencia. Amén.
Durante los distintos pasajes de la eucaristía, se interpretaron al órgano exquisitas composiciones musicales de inspiración religiosa:
Antes de abandonar el templo tomamos una fotografía testimonial delante del altar.
Los actos continuaron en el cercano restaurante Tres Mares Naútico, con un almuerzo de hermandad al inicio del cual pronunció unas palabras Don Carlos de Corbera, Presidente de la Sección de Aragón.
Delegada de la Orden en Tarragona, Damas de la Orden y representación de los RR.TT.
Expresó agradecimiento en primer lugar a la Virgen de Palestina por ser quien verdaderamente nos había convocado allí a todos. Agradecimiento mostró hacia el Lugarteniente de la España Oriental, que un año más se había desplazado para acompañarnos en este acto; al párroco, R.V. Don Mario Gallego, que siempre tiene abiertas las puertas de la Iglesia de San Gil para la Orden del Santo Sepulcro; a la Delegación de Tarragona asistente al acto y también a la Sección de Navarra, allí representada igualmente, que ahora comienza una nueva etapa, y a la cual Don Carlos brindó todo el apoyo que necesiten por parte de la Sección de Aragón.
Finalmente agradeció la presencia de todos los Caballeros y Damas de la Sección y de los acompañantes y amigos que habíamos asistido, sabedor de las dificultades que en estos momentos existen, y por ello explicó que la ausencia de algunos otros Caballeros y Damas de la Sección estaba justificada y que no obstante, en el corazón, si estaban en compañía nuestra.
Luego dijo lo siguiente Don Carlos: Si que quiero significar una ausencia muy especial para todos, que es la de Don Eusebio, nuestro Prior, que todos los años nos acompañaba. Sabéis que se está celebrando la visita Ad Limina al Papa, y Don Eusebio, con todos los obispos de las diócesis aragonesas, está de visita en Roma Pero no ha querido dejar de hacerse presente por medio de una carta que me ha mandado, con un saludo para todos vosotros, que os voy a leer: ”Estimado Lugarteniente, querido Carlos, Caballeros y Damas del Santo Sepulcro de la Orden de Jerusalén, lamento no poder acompañaros el día de Santa María Reina de Palestina en la eucaristía y celebración navideña que siempre celebramos juntos. Desde la tumba de San Pedro os envío un caluroso y afectuoso saludo. Aquí hago presente a toda la Orden y en especial a la Sección de Aragón.
Que la Virgen de Palestina siga siendo para nosotros, miembros de la Orden del Santo Sepulcro, la estrella que guía con seguridad nuestros pasos al encuentro de su hijo Jesucristo, y ya, próxima la Navidad, os deseo a todos un corazón abierto para reconocer a Dios en la debilidad de un niño que nace en un pesebre. Para todos mi bendición y mis mejores deseos en esta Navidad y Año Nuevo que vamos a comenzar. Eusebio Hernández Sola, Obispo de Tarazona”.
Puso de manifiesto Don Carlos que, después del paréntesis impuesto por la pandemia, gracias a Dios se vuelven a recuperar y a iniciar las actividades de la Sección.
Se han vuelto a celebrar las misas mensuales, se ha vuelto a celebrar la Virgen de Palestina y se va siguiendo, poco a poco, con todas las actividades en beneficio de la Orden para poder seguir colaborando y ayudando sobre todo a nuestros hermanos de Tierra Santa, que son los que nos necesitan y a quienes tiene encomendada su ayuda la Orden.
Recordó que todos los años la Sección de Aragón hacía algunas láminas o algún tipo de documento para poder recoger algún donativo extraordinario y poder presentarlo a la Lugartenencia. Este año, siendo que se celebró en Aragón el inicio de las actividades de la Orden con el Título de Proclamación de la Basílica del Santo Sepulcro, en Calatayud, que los Caballeros y Damas llevan tanto en el corazón, por ser canónigos de esa sede, la Sección ha querido hacer un facsímil del documento del Título de Elevación a Basílica del Santo Sepulcro, para poder también con ello colaborar con las obras de la Lugartenencia.
Es un facsímil del Decreto de la concesión del Título de Basílica, que se han numerado sus 50 ejemplares y que el Presidente de la Sección de Aragón esperaba les gustase mucho tenerlo a todos los Caballeros y Damas por su sentimiento como canónigos de esta Colegiata, o Basílica, y sobre todo por el fin que va a tener el donativo de ayudar a las obras de Tierra Santa.
A continuación intervino el Lugarteniente de la España Oriental con un primer capítulo de agradecimientos, y un reconocimiento muy especial hacia la Sección de Navarra porque sentía ilusión al saber que de nuevo la Sección de Navarra estaba activa en la Lugartenencia.
Luego dijo lo siguiente: El año 2021 comenzó con las dificultades de pandemia. En la misa de la Virgen de Palestina, que yo vine, Don Eusebio nos pidió que organizásemos el acto. Luego empezamos a trabajar en la Lugartenencia y nos pusimos en contacto con la Lugartenencia de la España Occidental. Yo pensaba que si vamos veinte o treinta Caballeros y Damas ya sería un acto bonito aunque no acudiera mucha gente, y quedé asombrado porque de nuestra Lugartenencia vinisteis cien Caballeros y Damas. Fue un acto precioso y con una participación tremenda.
Luego el año ha seguido y hemos podido hacer el Cruzamiento en octubre, y en todas las Secciones y Delegaciones hemos ido haciendo los actos, las misas mensuales. Yo he estado en muchas celebraciones de la Virgen de Palestina, en Tarragona, Navarra, recientemente en Valencia, en Alicante, y acabo hoy aquí en Zaragoza.
Creo que el año ha sido un año positivo. También quiero, con la transparencia que nos ha acostumbrado nuestro Gobernador General, que sepáis que hemos cumplido con los compromisos con Tierra Santa. Yo en octubre, si os acordáis, hice un llamamiento porque la recaudación era un poco floja y pedía un esfuerzo. Pues la verdad es que hubo una respuesta muy positiva y no solamente hemos cumplido con el plan que habíamos hecho sino que lo hemos superado.
Así que os felicito a todos vosotros porque la Lugartenencia, de verdad, ha cumplido muy bien. Después de este pequeño balance del año que estamos acabando quiero mencionaros algunas cosas que estamos preparando para el año que viene. Tenemos pensado hacer el Capítulo anual el 16 de marzo, que es la fecha en la que si acudimos a celebrar la misa en Santa Ana y veneramos las reliquias que allí tienen, obtenemos indulgencia como si fuéramos a Tierra Santa. Lo haremos coincidir pero con la ventaja adicional de que haremos Capítulo presencial y también telemático. Los que no puedan venir presencialmente también lo podrán seguir telemáticamente.
Luego como ya sabéis, y espero que vengáis todos los que podáis, tenemos el honor de hacer el próximo cruzamiento conjunto en Calatayud, el uno, dos y tres de abril. Creo que será un gran Cruzamiento, tenemos muchas expectativas porque además vendrá nuestro Gran Maestre y volveremos a hacer la ceremonia de Toma de Posesión de Canónigos el domingo en la Misa de la Vela de Armas.
Pero como tenemos más Caballeros y Damas que quieren entrar en la Orden y en Calatayud entrará un número limitado al haber dos Lugartenencias, estamos preparando también un segundo cruzamiento, para el 21 de octubre en Alicante.
Os voy a leer la felicitación de Navidad que nos ha mandado por mail, esta semana pasada, nuestro Gobernador General. Pero antes también os daré la cifra, que he recibido igualmente la pasada semana, de lo que la Orden a nivel mundial ha recaudado y lo que hemos enviado a Tierra Santa. En estos momentos, la Orden ha recaudado en todo el mundo nueve millones y medio de euros, hasta septiembre, y a Tierra Santa hemos enviado ya diez millones ciento noventa y tres mil euros. Es una cifra muy notable contando que es hasta septiembre. Como decía, os felicito la Navidad con la felicitación que nos ha mandado el Gobernador General, que dice lo siguiente. “Quisiera enviaros a todos mis mejores deseos de una Santa Navidad,
reconfortada por el amor de los más queridos y por la fe arraigada en el misterio de Cristo resucitado. El año que termina no ha sido fácil pero hemos continuado nuestro camino reconfortado por el apoyo de tantos hermanos y hermanas de todo el mundo. Tenemos la intención de continuar nuestros esfuerzos en el nuevo año con la esperanza de poder contribuir a la mejora de la vida en Tierra Santa a través de nuestras obras de caridad. Unido en oración, un abrazo con afecto fraterno. Feliz Navidad a Todos”.
Por último, el Excmo. Sr. D. Juan Carlos de Balle y Comas realizó con todos nosotros el siguiente brindis: “Quiero brindar por nuestros hermanos de Tierra Santa, por todos los Caballeros y Damas de la Orden del Santo Sepulcro de Jerusalén y por nuestro Gran Maestre el Cardenal Filoni, por el Papa y por el Rey”.
Una vez finalizada la comida de hermandad nos dirigimos hacia el palacio de la antigua Lonja de Mercaderes donde visitamos la Exposición Antológica dedicada al afamado pintor aragonés Francisco Pradilla Ortiz, teniendo la gran suerte de contar como guía con el Comisario de la exposición, Ilmo. Sr. D. Wifredo Rincón García. La exposición mostraba 187 obras, de las que el cuarenta y cinco por ciento, 89, nunca se habían expuesto, hallándose aquí colocadas todas ellas con arreglo a un montaje cronológico, temático y estético.
Francisco Pradilla nació en Villanueva de Gállego, comenzó a estudiar en su pueblo natal y posteriormente se vino a Zaragoza a estudiar bachillerato. Sabemos que en el segundo curso no llegó a completar su formación y, años más tarde, diría que tuvo que dejar de estudiar porque la situación de su familia no era muy boyante. Está en Zaragoza de 1859 al 66, formándose con Mariano Pescador, en la Escuela de Bellas Artes, que dependía de la Academia de San Luis de Zaragoza, donde cursa los tres primeros años de formación.
Luego, en el 66 se marcha a Madrid, donde va a estar del 66 al 74. Lo primero que sabemos es que se registra como copista del Museo del Prado. En ese momento, y se sigue haciendo actualmente, los pintores se iban a formar al Museo del Prado, a copiar los cuadros para encontrar el concepto pictórico, la composición y el color de los grandes maestros, y Pradilla por supuesto lo hace. Además va a estudiar en la Escuela Superior de Pintura y Escultura, que es como la continuación de la de Zaragoza. Se va a formar también con Federico de Madrazo, que era el Director del Museo del Prado, un gran pintor, y va a asistir a sus clases, a nivel particular en su estudio.
También va a asistir a las clases de una asociación de acuarelistas que se crea entonces en Madrid. En ese momento, en 1873, se funda la Academia de Bellas Artes, española, en Roma, con la idea de apoyar la educación de los jóvenes artistas españoles, como tenían Francia y otras naciones en Roma.
Se crean plazas de pensionado para pintura, escultura y arquitectura, de número, que son para los iniciados más pequeños, y de mérito, que son para los artistas ya consagrados que van a perfeccionar su estilo. A Pradilla lo apunta su tío, Simón Pradilla, para Pintura de la Historia.
A juicio del Comisario de la exposición, esa pintura de la historia fue, de alguna manera, una estigmatización de toda su vida y de toda su fortuna artística también, porque Pradilla ha pasado a la historia como el gran pintor de la Pintura de Historia y Pradilla hizo muchas más cosas, como veríamos en la exposición.
Vuelve de Roma, con su “Juana la Loca”, tan maravillosa y premiadísima y, después, decide en el 78 marcharse otra vez a Roma, y allí va a estar del 78 al 97, que son muchos años. Va a llevar a cabo una gran producción y, en interim, va a ser Director de la Academia de Roma, dos años. No era una persona que supiera doblegarse a las cosas de tipo político, y en aquel momento había mucho, y en el 97 vuelve a España porque le nombran Director del Museo Nacional de Pintura y Escultura, actual Museo del Prado. Le pasó otra vez lo mismo y después de dos años, con muchas presiones políticas, renuncia en septiembre del 98 y se retira a su casa a pintar, hasta su muerte en 1921.
Wifredo Rincón nos decía, gracias a esta poca disposición para los cargos políticos, tenemos la gran obra que hizo. Su hijo, Miguel Pradilla, también pintor, fijaba la obra de su padre entre 4.000 y 5.000 obras, aunque no sé si eso será excesivo. Yo tengo catalogadas unas 1.800, de las que aquí se presentan 187. Habrían cabido algunas más, pero el edificio no daba para mucho más. La lonja de Zaragoza se construyó en 1551 y es una lonja comercial, como la de Barcelona o la de Palma, en este caso renacentista aunque la bóveda todavía es gótica.
La construyó Don Hernando de Aragón, Virrey de Aragón, para Lonja de Mercaderes. Pradilla tenía un estudio en el Paseo de Rosales de Madrid, justo en el Parque del Oeste, con una luz espectacular, y allí muere el 1 de noviembre de 1921.
Siguió explicando el Comisario de la exposición que de las obras traídas para la muestra, casi todas ellas procedían de colecciones particulares, algunas de las cuales, hasta la propia exposición, las conocía por fotografías y referencias de todo tipo pero no al natural.
Yendo ya a los cuadros, mostró cinco retratos. Uno es un autorretrato de Pradilla, de 1879, los otros son de su padre, su hermano Baltasar, su hermana Brígida y su hermano Pascual. Estos cuadros han estado antes un siglo, en una casa de Zaragoza, puestos en un panel tapizado en rojo, los cinco retratos. Lamentablemente, a la muerte de la propietaria de la colección, se dispersaron y actualmente están en tres colecciones distintas. Están fechados hacia 1879 porque Martina Ortiz, su madre, muere en el 78 y no está, aparte de que se trata de la obra de un pintor joven, de unos 21
años.
Su marcha a Madrid va a significar empezar a recorrer los alrededores de la capital. Para entrar en la Academia de Roma hay un proceso, una oposición, y tiene que pintar, como último paso, una escena del Rapto de las Sabinas. Este cuadro está en la Facultad de Bellas Artes de Madrid y se ha restaurado para la ocasión. Una de las cosas importantes de las exposiciones de este tipo antológico es que muchas obras se restauran. En Roma va a estar tres años, 74-75, 75-76, 76-77.
Como obligaciones de pensionado tenían que entregar cada uno una obra, que estaba de alguna manera reglada.
El primer año tenía que hacer una copia de una obra que no existiera, de San Luis, en España, y copia con Ferránt un enorme cuadro, que es la disputa de San Luis en el Sacramento de Rafael, que está en el Patio Vaticano. Para el segundo año tiene que hacer un desnudo y Pradilla hace este maravilloso ejemplo de desnudo que, si quitamos las figuras del padre y del niño, (que está inspirado en todos los estudios que hace de Rubens en el Museo del Prado), queda un paisaje naturalista precioso. Para el tercer año los pintores de historia tiene que hacer una composición de tipo histórico y Pradilla hace el cuadro de Doña Juana la Loca, en los adarves del Castillo de La Mota, en Medina de Campo, cuando su padre la encierra allí.
Una curiosidad nos explicó Wifredo Rincón y es que lo que vimos en la exposición no era el cuadro original puesto que no se pudo traer debido a sus enormes dimensiones. Se mostraba una reducción de la pintura, obra de Jaime Morera, compañero suyo, que es el estudio de Pradilla en Roma, cuando ha pintado el cuadro de Doña Juana la Loca. Contemplamos pues un cuadro fuera de exposición que sin embargo constituía una joya para la misma. En el 77 Pradilla vuelve a Madrid y va a empezar a buscarse la vida como pintor.
Presenta su cuadro de Doña Juana la Loca, que está en el Museo del Prado, a la Exposición General de Bellas Artes del 78 y consigue la Medalla de Honor, que es la primera vez que se da desde que se dieron las exposiciones en el 56. Es una distinción que no había conseguido ni Casado del Alisal, que era su maestro, ni otros muchos artistas. Eso le da fuerza para presentarlo también a la Universal de París del 78, y allí gana también la Medalla de Honor. Pradilla decide marcharse a vivir a Roma, casado ya con una gallega que había conocido en sus estancias gallegas de verano. Pradilla es discípulo de Carlos de Haes, que es el que va a revolucionar la pintura de paisajes. Hasta Carlos de Haes, Pérez Villaamil y otros artistas de la Academia de San Fernando lo que hacían era inventar en el estudio los paisajes.
En el camino de Madrid a Roma, pasando por París para ver su cuadro en la exposición, recibe dos cartas. Una de ellas es la invitación del Marqués de Barzanallana, Presidente del Senado, para que haga el gran cuadro de la Rendición de Granada, y la segunda carta es del Ayuntamiento de Zaragoza, para que haga dos retratos de Reyes de Aragón.
Uno de ellos es el del rey Alfonso I el Batallador, quien a su muerte legó su reino a las Órdenes Militares de Jerusalén y por lo cual la Orden del Santo Sepulcro fue implantada en Aragón. Los Caballeros y Damas realizaron una fotografía de grupo junto al famoso cuadro del Batallador, por su simbolismo histórico para la Orden como despedida de la visita a la exposición.